Ciudad de México

La deuda de 100 mil millones de dólares, los problemas de refinación, el arranque lento de la refinería Olmeca en Dos Bocas y el huachicol, no son los únicos problemas que enfrenta Pemex.

La petrolera que dirige Octavio Romero Oropeza y que en unos días asumirá Víctor Rodríguez Padilla, no ha concluido en esta administración, incluso las cifras apuntan a todo lo contrario y, en los hechos, sus sindicalizados ya han escalado sus conflictos a los golpes.

Los intereses por el poder dentro de Pemex persisten hasta el final de sexenio y este jueves 26 de septiembre, a cuatro días del relevo presidencial, ocurrió otro escándalo ahora en las instalaciones del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM).

El día inició con el asalto de un grupo de 30 personas a la sede de esa organización gremial, en la colonia Guerrero de la Ciudad de México.

El movimiento disidente del sindicato que encabeza Rubén Choreño Morales entró al inmueble a las 07:30 horas de ayer jueves.

Enseguida realizó entrevistas explicando que supuestamente es el líder del sindicato, sin mostrar documentos, con el argumento de que a inicios de 2019 ganó en una asamblea la Secretaría General del STPRM.

Desde entonces Choreño Morales ha pedido que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social lo ratifique, pero eso no ha sucedido.

Este jueves 26 de septiembre, en conferencia, Fernando Navarrete Pérez, presidente del Consejo General de Vigilancia del STPRM, explicó que llamaron a las autoridades y acudieron elementos de la Secretaría de Seguridad.

“Cuando llegaron las autoridades, las personas salieron corriendo. Nosotros hicimos lo que nos correspondía, emitimos de alerta la solicitud de intervención a las autoridades”, apuntó.

Luego sobrevinieron los golpes; hasta ahora se reconoce que hubo al menos 5 heridos. Dentro de estos estuvo Choreño Morales, que recibió una golpiza y quedó en la acera del Sindicato ensangrentado y fue reportado más tarde como grave.

Por la noche, el STPRM informó que las instalaciones de su organización fueron atacadas por un grupo de personas embozadas y armados con barretas y herramientas. comandadas por Rubén Choreño Morales, quien se ostenta como Secretario General de nuestro Sindicato.

“Destruyeron puertas, ventanas y agredieron a nuestras compañeras y compañeros que ya se encontraban trabajando”.

Agregó que “desde 1992 esa persona dejó de pertenecer a Pemex y al sindicato”.

El pasado 17 de abril bloqueó el periférico diciendo que eran petroleros, según consta en un comunicado de ese día, donde señaló el STPRM que desde el 11 de abril el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral resolvió:

“Único: Se declara improcedente la solicitud de registro de modificación de directiva presentada por Rubén Choreño Morales en términos de los considerandos precedentes. Notifíquese”.

*Con información de El Universal