Morelia, Michoacán

Una nueva polémica relacionada con los usos y costumbres de ciertos pueblos del interior del país estalló a nivel nacional luego de conocerse que, en un festejo tradicional en la comunidad de Calkiní, en Campeche, tanto adultos como niños rompieron piñatas de barro, repletas, no de caramelos, sino de animales vivos como iguanas, serpientes y hasta zorros.

En un video publicado en redes sociales, se ve a diversas personas golpear las vasijas hasta romperlas, y luego perseguir a los animales que, un tanto aturdidos, buscaban salvarse.

Tras darse a conocer el acto, que muestra claramente el maltrato animal hacia las criaturas indefensas, se desató una ola de repudio en las redes sociales con comentarios de desaprobación :

Así fueron los comentarios

  • Que lamentable ver niños atrapando y matando animales, lo ven como una “tradición” o algo normal, sin duda se debería prohibir este tipo de actos.
  • ¿A quién sancionarán? ¿Quién autorizó esa barbarie?
  • ¡Justicia!… y que se acaben esas dichosas tradiciones.
  • Que terminen esas malditas tradiciones, no puede permitirse que los niños crezcan con esas dolorosas costumbres.
  • ¡Qué espantoso! Es increíble que en estos tiempos se sigan estas prácticas inhumanas.

El caso ha reavivado el debate sobre los límites de las costumbres populares frente a los derechos de los animales.

Mientras algunos defensores argumentan que se trata de una “tradición ancestral”, especialistas en bienestar animal y legisladores insisten en que ninguna celebración puede estar por encima de la ley.

¿Y la autoridad?

De acuerdo a medios locales, la Fiscalía Especializada en Delitos contra Animales, Ambiente y Ecosistemas, liderada por Alexandro Brown, confirmó que ya inició una investigación exhaustiva.

Simultáneamente, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) está llevando a cabo un proceso legal contra los organizadores y funcionarios que permitieron este acto de crueldad animal.

“Ninguna práctica cultural justifica el maltrato animal”, declararon las autoridades, recordando que en Campeche este tipo de acciones están tipificadas como delito, con penas que van desde 6 meses hasta 3 años de prisión, además de multas que pueden superar los 22 mil pesos.