Rusia lanza una operación antiterrorista para contrarrestar la ofensiva de Ucrania en regiones fronterizas.
El pasado sábado, Rusia emprendió una ‘operación antiterrorista’ en Bélgorod, Briansk y Kursk, regiones limítrofes con Ucrania, con el objetivo de detener el avance de las fuerzas de Kiev.
Esta acción responde a la incursión más significativa en territorio ruso desde el inicio del conflicto hace dos años y medio.
Además, se procedió a la evacuación de más de 76 mil residentes del oeste de Kursk a zonas seguras, según reportaron medios locales.
“Más de 76 mil personas fueron trasladadas temporalmente hacia lugares seguros”, señaló una fuente de la agencia estatal TASS, citando a un portavoz del ministerio de Situaciones de Emergencia.
Rosatom, la corporación estatal nuclear, indicó que la ofensiva ucraniana cerca de Kursk representa una ‘amenaza directa’ para una planta nuclear cercana.
El martes, tropas ucranianas irrumpieron en Kursk y avanzaron varios kilómetros, según expertos independientes. El viernes, Rusia desplegó más tropas y equipo militar, incluyendo tanques y lanzacohetes, en un intento por repeler esta sorpresiva ofensiva.
Operación Antiterrorista en Rusia
Durante la noche, el Comité Nacional Antiterrorista ruso anunció que estaba llevando a cabo ‘operaciones antiterroristas en las regiones de Bélgorod, Briansk y Kursk’ para ‘garantizar la seguridad de los ciudadanos y suprimir la amenaza de actos terroristas por parte de grupos de sabotaje enemigos’.
Este tipo de operaciones permite a las fuerzas de seguridad y al ejército rusos ejercer amplios poderes de emergencia, incluyendo la restricción de movimientos, la confiscación de vehículos, el control de comunicaciones, la instalación de puestos de control y el aumento de la seguridad en infraestructuras vitales.
El comité calificó la incursión ucraniana como un ‘ataque terrorista’, acusando a las fuerzas de Kiev de herir a civiles y destruir edificaciones residenciales. No se ha proporcionado información detallada sobre el número de tropas involucradas por ambas partes.
Inicialmente, el ejército ruso indicó que Ucrania había desplegado cerca de mil soldados y más de veinte vehículos blindados y tanques, aunque luego afirmó haber destruido un número significativamente mayor de equipo militar ucraniano. Estas cifras no han sido verificadas de forma independiente.
“La guerra ha llegado a nosotros”, expresó una mujer mientras huía de la zona fronteriza en una estación de tren en Moscú el viernes.
En el este de Ucrania, continúa siendo el epicentro del conflicto, donde recientemente un bombardeo ruso sobre un supermercado en Kostyantynivka resultó en al menos 14 muertes, de acuerdo con servicios de emergencia.
Mientras tanto, el Ministerio de Defensa ruso aseveró haber golpeado posiciones ucranianas a más de 10 km de la frontera, mostrando la escala del avance ucraniano.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, comentó que Rusia, que inició el conflicto en febrero de 2022, ahora debe ‘sentir’ sus consecuencias.
Aunque Estados Unidos, el principal aliado de Kiev, indicó no haber sido informado previamente sobre los planes de la operación.
