Morelia, Michoacán, 02 de septiembre de 2024.- En Michoacán, es una realidad sociopolítica, el proyecto de la cuarta transformación ha llegado para quedarse y, por ende, tener una larga vida, pues los resultados obtenidos, hasta el día de hoy, muestran un avance sustancial en todas las materias. O sea, es un movimiento consagrado que ha venido revolucionando el devenir social. De hecho, esa labor la ha defendido la misma población civil a través de los distintos mecanismos de evaluación que miden el termómetro de efectividad. Y, con un enfoque meramente progresista, así podemos definir el trabajo que se lleva a cabo a nivel nacional, lo mismo que en las entidades federativas que gobierna Morena.

Eso precisamente pasa en Michoacán. La última encuesta que publicó Demoscopia Digital, coloca al gobernador constitucional, Alfredo Ramírez Bedolla, entre los siete mandatarios mejor evaluados de México. Para ser exactos, más del 67% de la ciudadanía respalda las políticas públicas que son, por cierto, como el legado que ha dejado el presidente López Obrador. Para tal efecto, ha sido determinante recurrir a los cambios constitucionales para darle mayor certeza, equilibrio y progreso al territorio nacional. En esa misma dirección camina el proceso de transformación en Michoacán. El Plan Morelos, desde luego, significa ahondar en un andamiaje de mecanismos constitucionales que, a la postre, traerán un bienestar social mayúsculo. Así se ha definido esta plataforma que presentó el gobernador ante la opinión pública.

El Plan Morelos, a partir de su puesta en marcha, ha cumplido a cabalidad la responsabilidad de servir al pueblo de Michoacán. Hoy, en tiempos inmejorables como el que vive el movimiento, las condiciones son propicias para concretar un paquete de reformas constitucionales que ha propuesto el gobernador, Alfredo Ramírez Bedolla. Y lo dijo de esa forma, pues el congreso local, decidido a impulsar las acciones de beneficio social, respaldará cada uno de los puntos de este programa. Desde luego, eso será posible con el apoyo irrestricto de los legisladores locales que, en su gran mayoría, forman parte de la coalición Seguimos Haciendo Historia. Entonces, hay coincidencias para reformar la constitución.

Y justamente hoy, ante una cantidad importante de asistentes que se dieron cita, Alfredo Ramírez detalló cada una de las propuestas que enviará al legislativo para fortalecer la transformación a lo largo y ancho del territorio Purépecha. Ahí, de hecho, se especificaron algunos puntos medulares de la agenda que, para ser exactos, se puntualizan en cinco grandes temas. Entre ellos, por supuesto, la reforma en materia indígena, la elevación a rango constitucional de los programas sociales, la reforma para la democratización y presupuesto pleno de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, el reconocimiento de los derechos de las mujeres a decidir sobre su cuerpo y los derechos y responsabilidades del medio ambiente.

Y, por si eso fuese poco, el Plan Morelos, por la dimensión de su contenido, contempla cuatro temas para las reformas constitucionales. En ese orden, en efecto, figura la reforma a las fiscalías generales de los estados, la reforma para garantizar la no reelección, la reforma al poder judicial y la reingeniería administrativa en todos los niveles de gobierno. Esto incluye, desde luego, un gran sentido de identidad con los usos y costumbres, pero, de igual manera, un humanismo basado en los principios intrínsecos de la cuarta transformación de la vida pública, sin olvidar los derechos humanos y la democracia participativa que, para el caso, constituye el motor de impulso para alcanzar las metas trazadas.

Con ese gran olfato que ha demostrado tener el gobernador de Michoacán, no tengo la menor duda que será, a la mitad del sexenio de Bedolla, el parteaguas de la consagración del proyecto de la 4T. Así los percibimos quienes tenemos la certeza de que existe un cambio sustancial desde la llegada de Morena al poder institucional de la entidad, especialmente bajo la premisa de una agenda común que ha decidido compartir en presencia de todos los sectores sociales el mandatario estatal. Hay que decirlo así: la administración está marcando un precedente muy importante en un momento crucial como el que se vive a nivel nacional.

Y como Claudia Sheinbaum y Alfredo Ramírez Bedolla comparten el mismo proyecto, vendrán meses en trabajo conjunto y coordinado para llevar más progreso social y, de paso, mejorar la calidad de vida que, en definitiva, es una de las razones más poderosas para poner en marcha el Plan Morelos.