Estados Unidos impulsa iniciativa para elevar producción de chips involucrando a países de América Latina
Estados Unidos.-Estados Unidos ha lanzado un ambicioso proyecto para aumentar su capacidad de producción de chips o semiconductores, involucrando a varias naciones de América Latina.
La estrategia, denominada “iniciativa del Hemisferio Occidental para Semiconductores”, tiene como objetivo colaborar con México, Panamá y Costa Rica para establecer y fortalecer la fabricación de chips en la región.
Este plan fue anunciado por Antony Blinken, secretario de Estado de Estados Unidos, y busca reducir la dependencia del mercado dominado por China.
El anuncio se realizó en la última sesión ministerial de la Alianza para la Prosperidad Económica en las Américas (APEP), una coalición que incluye a Estados Unidos, Canadá, México, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Perú, República Dominicana, Panamá, Uruguay y Barbados.
Blinken destacó que la iniciativa ampliará las habilidades de los países en ensamblaje, prueba y empaquetado de semiconductores.
Apoyada por el Banco Interamericano de Desarrollo y fundamentada en la ley Chips y Ciencia, que asigna 52 millones de dólares en inversiones gubernamentales para potenciar la industria de chips en Estados Unidos esta ley también implementa restricciones para limitar transacciones comerciales con China.
Con esta política, los países involucrados recibirán apoyo técnico y financiero para fomentar inversiones del sector privado. Según Blinken, el proyecto busca fortalecer las cadenas de suministro regionales y generar nuevas oportunidades económicas.
Se anticipa que los primeros proyectos, valorados en unos 3 millones de dólares, mejorarán la infraestructura y harán los productos más seguros y accesibles.
Aunque Taiwán sigue siendo el líder mundial en producción de chips, la competencia se intensifica con la creciente demanda de tecnologías como la inteligencia artificial, situando a Estados Unidos y China en una carrera por la supremacía en este sector.
Te puede interesar:
No obstante, la viabilidad del plan ha sido cuestionada. Paul Triolo, de Albright Stonebridge Group, mencionó que las dificultades previas en la construcción de plantas avanzadas en Estados Unidos y la escasez de mano de obra calificada podrían obstaculizar la implementación en México, Panamá y Costa Rica.
La política también podría verse afectada por la situación política, especialmente con las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos, donde Donald Trump ha criticado fuertemente los acuerdos comerciales con México y Canadá, lo que podría poner en riesgo la iniciativa.