Daire Zúñiga / La Voz de Michoacán

En políticas públicas a nivel estatal en Michoacán el 96 por ciento de los municipios no cuenta con un Centro de Atención Animal, y aunque especialistas consideran que no es necesario contar con éstos para abordar las políticas públicas en la materia, la cifra sugiere que si no hay un centro no abordan temas de prevención en animales en situación de calle.

Así lo expresó el activista en favor de los derechos de los animales, Carlos Daniel Maya Cordero, quién formó parte del Simposio de Bienestar Animal “El control de la población canina en situación de calle”, en donde se alertó de la poca planeación en materia municipal para abordar esta problemática y, además, dignificar la vida de los seres sintientes y en especial de los animales de compañía.

Este sábado la Universidad Ágora Hispanoamericana ofreció una disertación en la cual el ponente afirmó que dentro de la entidad solamente algunos municipios cuentan con un espacio para la atención animal en forma, como Morelia, Zitácuaro, Charo y Maravatío. No obstante, afirmó que con ellos el problema no logra resolverse en dichas localidades, ya que hay un alto índice de ejemplares que son sacrificados y generalmente los perros y gatos en estos recintos son abandonados por sus propios responsables.

En algunos casos, como en el municipio de Quiroga, mencionó que los centros de atención animal han dejado de operar debido a la falta de atención de las administraciones municipales y en Tarímbaro, únicamente se cuenta con un centro de esterilización que hace años no se encuentra funcionando.

En este contexto, mencionó que la exigencia de los centros de atención animal en Michoacán se convierte en una situación en la que, desgraciadamente, muchas veces sólo se generarían espacios de “exterminio” para mascotas abandonadas y animales en situación de calle, donde se buscaría legalizar el sacrificio de animales reportados como supuestamente agresivos o que son considerados como un riesgo para la ciudadanía.

Adicionalmente, Maya Cordero compartió que según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la población canina en México asciende a aproximadamente 23 millones, de los cuales, el 70 por ciento de ellos están en situación de calle, sin embargo, aseguró que no hay un censo exacto debido a que se trata de una población flotante, ya que aunque se realice labor de rescate cada día se reportan ejemplares que son abandonados por sus dueños.

El activista aprovechó para resaltar que lo que hace difícil la vida en las calles para los animales es la misma sociedad, que complica su desarrollo con actos de violencia e injusticias hacia los mismos, pues en algunos casos, se llega a tener una tenencia responsable de mascotas en una comunidad, donde ninguno es el dueño en particular, pero los vecinos se organizan para alimentarle y brindarle cuidados básicos.

Un ejemplo de este tipo de cuidados se da en Morelia en el fraccionamiento Indeco, donde los vecinos cuidan y atienden a una docena de animales callejeros.

Asimismo, el conferencista sostuvo que, desgraciadamente, el hecho de que un ejemplar cuente con una familia no garantiza su calidad de vida, pues en ocasiones los responsables llegan a ejercer violencia sobre ellos, manteniéndolos en las azoteas de sus domicilios o siendo negligentes sobre su alimentación y cuidados básicos.

Urgen a regular compraventa

Por su parte, Rosa María de la Torre Torres, doctora en Derecho Constitucional y activista de los derechos animales, quien también participó en el simposio, aseguró que para comenzar a solucionar el problema es necesario que los diferentes niveles de gobierno prohíban prácticamente por completo la compraventa de animales, así como la reproducción de animales en lo clandestino.

En su intervención habló sobre la obligación de la ciudadanía sobre el cuidado de los animales, principalmente de aquellos que son llevados a un hogar y con el paso del tiempo, ya sea por falta de espacio o de tiempo, son abandonados por sus dueños.

Al finalizar la conferencia, Ana Luz Mila Barrera, rectora de la Universidad Ágora, expresó que es necesario elegir este tipo de temas para la investigación y obtención de un grado académico, con el fin de poner en la agenda pública y legislativa asuntos que impacten a la sociedad.

“A veces hacemos tesis muy sustentadas que vemos en cuatro paredes y ahí se quedan, pero que lo hagamos y expresemos socialmente y podamos compartir con especialistas tiene una valía y un resultado mucho mayor socialmente”.