Morelia, Michoacán
El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, consideró el homicidio del líder limonero, Bernardo Bravo Manríquez, como un hecho doloroso e impactante, pues se trata de una persona dedicada a su labor productiva.
El mandatario estatal declaró en entrevista que la labor del citricultor forma parte de las líneas de investigación que contempla la Fiscalía General del Estado (FGE).
Cabe recordar que Bernardo Bravo denunció constantemente las condiciones de inseguridad que vive el agro en la región de Apatzingán, así como el cobro de piso por parte de los grupos del crimen organizado.
El titular del Ejecutivo estatal señaló que el Gobierno del Estado y la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) colaboran con la FGE en las investigaciones, pues, aseguró, este delito no quedará impune.
Recordó también que ya hay una persona detenida por su presunta participación en el homicidio de Bravo Manríquez.
Ramírez Bedolla mencionó que, según lo informado por el Fiscal, Carlos Torres Piña, el líder de los limoneros se trasladó de Morelia a Apatzingán acompañado de sus escoltas, ahí, cambió de vehículo y viajó solo.
El cuerpo sin vida de Bernardo Bravo fue localizado el pasado lunes cerca de las ocho de la mañana al interior de su vehículo. Según lo informado por la FGE, la causa de muerte fue una herida en la cabeza por disparo de arma de fuego.
