Washington, Estados Unidos
Este lunes 15 de julio, la jueza que preside el caso por mal manejo de documentos clasificados contra el expresidente Donald Trump, en Florida, desestimó la acusación debido a los cuestionamientos sobre el nombramiento del fiscal.
La jueza federal Aileen Cannon, cuyo manejo del caso ha provocado cuestionamientos, aceptó la moción de la defensa para desestimar el caso.
Los abogados de Trump argumentaron que el fiscal especial Jack Smith fue designado ilícitamente y que su oficina recibió financiamiento inadecuado del Departamento de Justicia.
La decisión de la jueza pone un fin abrupto a un caso penal que, en su momento, fue considerado el más peligroso de todos los que penden sobre el expresidente republicano.
Trump ha sido acusado de retener ilegalmente documentos clasificados en su mansión Mar-a-Lago, en Palm Beach, Florida, y de obstaculizar los intentos del FBI de recuperarlos.
El equipo de Smith había rechazado ese argumento enfáticamente ante Cannon el mes pasado, afirmando que aun si la jueza le da la razón a la defensa, la rectificación no debería ser la desestimación del caso entero.
El mes pasado, Cannon había concedido una pausa en el procesamiento contra el expresidente después de que la Corte Suprema le otorgara inmunidad parcial.
La Corte falló que los presidentes de Estados Unidos no pueden ser procesados al dejar el cargo por actos que llevaron a cabo dentro de sus funciones oficiales.
Los documentos fueron recuperados en una redada del FBI en agosto de 2022 después de que Trump rechazara reiteradamente la petición de las autoridades para que los devolviera.
