Cynthia Klitbo habla de superación donde enfrenta adversidades con valentía y busca activamente nuevas oportunidades.
Ciudad de México.-Cynthia Klitbo, la destacada actriz mexicana de 57 años, atraviesa un periodo lleno de desafíos después de ser afectada por un fraude bancario que eliminó sus ahorros, por ello habló de superación.
A pesar de esto, su resiliencia y su fe la impulsan a superar estos tiempos difíciles, encontrando ‘milagros’ en su camino.
Famosa por roles en telenovelas como ‘El privilegio de amar’ y ‘Teresa’, Klitbo ha sido proactiva en asegurar su bienestar y el de su hija Elisa Fernanda, de 18 años.
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“Bueno, mira, para empezar, yo levanté teléfonos y ahorita yo ya empiezo película en dos semanas. Empiezo novela con Lucero Suárez en México. Estoy muy contenta. Arranco el 24 de febrero. Tengo otra película. Lo que hice primero fue levantar todos los teléfonos, porque yo no me espero a que me busquen el trabajo. Yo me lo consigo”, relató en una entrevista para el programa La Mesa Caliente.
Su tenacidad ha sido clave en su búsqueda de oportunidades: “Mi hermana Jenny y yo hemos estado levantando teléfonos y me dicen: ‘¿Cómo les dices así?’ Pues así: ‘Necesito chamba'”.
El soporte de sus compañeros y admiradores ha sido esencial.
“Me voy con Aylin Mujica a hacer un evento. Un amigo que salió por Instagram, gente por Instagram lindísima. Me llamó muchas personas para decirme que me echaban la mano. Les agradezco infinitamente”, expresó agradecida.
Después de caer en un engaño telefónico que vació sus cuentas, Klitbo ha tenido que considerar opciones extremas para asegurar la educación de su hija: “Estoy dispuesta a vender mis propiedades porque quiero mantener a mi hija estudiando. Si tengo que trabajar de Uber, lo haré”.
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En esta crisis, ha vivido ‘milagros’, como el día que fue al banco y el gerente le ayudó a recuperar $2,700, justo la cantidad que debía por mantenimiento del edificio donde vive. “Me hablan y me dicen:
“Oiga, el mantenimiento de su torre no se pagó”.
No sé por qué en dos meses. ¿Cuánto es dos mil setecientos dólares?”. Para Klitbo, estos eventos son signos de ayuda divina en tiempos difíciles.
