Morelia, Michoacán

La presa de Cointzio se encuentra al 37 por ciento de su capacidad, y se espera que continúe aumentando gracias a la temporada de lluvias, así lo indica el reporte de presas automatizadas de Michoacán de la Comisión Estatal de Aguas y Gestión de Cuencas (CEAC).

El cuerpo de agua tiene una función agrícola, destinada a dotar de agua al sector agropecuario y a los distritos de riego de Tarímbaro, Charo y Álvaro Obregón. “Cointzio es una presa agrícola; los dueños de esa presa son los campesinos del valle de Guayangareo, no los habitantes de Morelia”, ha puntalizado el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla.

A diferencia de otras presas de la entidad que se encuentran practicamente rebasadas como la presa Francisco J. Múgica con 103%; Urepetiro con 103%; La Villita con 95%; la Presa de Cointzio se encuentra al 37%, derivado de su uso agrícola.

El mandatario estatal ha señalado que el agua de la presa se utiliza para el riego de cultivos de Tarímbaro y Álvaro Obregón, no obstante, llega sin ser tratada y para ello se ha creado una línea de conducción de la planta de Atapaneo para que riegue hortalizas y verduras que son cosechadas en dichos espacios.

Del total de agua de la presa, cerca del 30% se destina para suministro de la poblacion moreliana, el resto es para el campo.

La presa de Cointzio, ubicada en la parte alta de Morelia, aprovecha la gravedad para transportar agua hacia la ciudad y posteriormente hacia Atapaneo, donde se encuentra la planta tratadora. Desde ahí, el agua sigue su curso hacia el valle de Guayangareo y finalmente llega al Lago de Cuitzeo.

La construcción de la línea de conducción forma parte de un proyecto de conservación del Lago de Cuitzeo. Este proyecto también aborda la necesidad de preservar el lago, una responsabilidad compartida por los habitantes tanto de Morelia, como de municipios vecinos al Lago de Cuitzeo.