El poder se construye con ternura, solidaridad y visión de futuro», dijo Gaby Molina al recordar a Amalia Solórzano Bravo en el aniversario de su natalicio

Morelia, Michoacán. - El poder se ejerce con ternura, coherencia y visión de futuro, el poder que sólo se logra con la solidaridad y con la organización de las mujeres para cuidar a nuestras comunidades, para reconducirnos hacia una cultura de paz basada en educación, cultura y equidad, expresó Gaby Molina Aguilar al recordar a doña Amalia Solórzano Bravo, compañera de vida del general Lázaro Cárdenas del Río, y protagonista de una historia propia, tejida con hilos de compromiso, sensibilidad y patriotismo.

En la conmemoración por el aniversario del natalicio de Amalia Solórzano, quien nació en 1911, Gaby Molina rememoró a una mujer que, sin haber buscado los reflectores del poder, supo caminar con dignidad, convicción y firmeza por los pasillos de la historia. Su legado crece con el tiempo porque se hace más visible conforme a las mujeres se les reconocen acciones y valores como la crianza, el actuar prudente y firme que vela por la comunidad y que no se contamina de la política entendida solamente como disputa por el poder.

Previo al depósito de una ofrenda floral al pie del medallón conmemorativo ubicado al sur de esta ciudad, en su discurso como oradora oficial Gaby Molina aseveró que doña Amalia es también una fundadora de las izquierdas para nosotras las mujeres. Sus valores y acciones sociales en beneficio de tantas y tantos mexicanos hoy son un precedente y un legado que nos sirve de apoyo para el momento que vivimos.

Recordó también que Amalia Solórzano convocó a las mujeres mexicanas a apoyar la expropiación petrolera en 1938, que significó una auténtica participación en la vida pública del país de las mujeres en un momento crucial de nuestra historia. Agregó que fue la mejor ex primera dama que hemos tenido, de un carácter discreto; cuando Cárdenas fue presidente de México, de una manera profunda dedicó su vida posterior a leer las miles de peticiones que le hacían y a tratar de resolverlas.

Ante la diputada Melba Albavera Padilla; Nuria Gabriela Hernández Abarca,de laSecretaría de las Mujeres Morelianas para la Igualdad Sustantiva; Guadalupe Sánchez Martínez, ex secretaria de Gobierno; Maricruz Campos, ex diputada local, y Alma Griselda Valencia Medica, ex legisladora federal, Gaby Molina recordó que doña Amalia participó en los primeros actos políticos feministas, en reuniones sindicales y en asambleas de figuras del arte y la cultura en México. Creó, además, una fundación para apoyar a las niñeces indígenas y un comité de ayuda para los niños del exilio español en México.

Ante la presencia de los amigos de doña Amalia, la oradora recordó el impulso a la asistencia social, su lucha por la educación popular, y su labor vital en la acogida de los 456 niñas y niños refugiados de la Guerra Civil Española, conocidos como los Niños de Morelia. En ese gesto no sólo protegió la vida de cientos de menores, sino se reafirmó́ el valor universal de la solidaridad por encima de las fronteras y las ideologías.

Gaby Molina afirmó que doña Amalia es un legado vivo que se debe empuñar para avanzar en la articulación política de las izquierdas desde la lucha de las mujeres, en un contexto en el que se cuenta con una presidenta, Claudia Sheinbaum Pardo, quien al llegar a la primera magistratura de México “nos dio poder a todas, dando sentido a la lucha de mujeres como Amalia Solórzano, Gertrudis Bocanegra, Cuca García, Rita Cetina, Ifigenia Martínez y tantas otras a quienes debemos los sueños de emancipación de las mujeres de México”.