Brasilia, Brasil

El juez Alexandre de Moraes, relator del juicio contra el expresidente brasileño Jair Bolsonaro, consideró este martes 9 de septiembre que el líder ultraderechista culpable intentó atentar contra el régimen democrático e instalar una “dictadura”, tras ser derrotado en las urnas por el actual gobernante, Luiz Inácio Lula da Silva.

Moraes también se mostró convencido de la culpabilidad de otros siete reos juzgados junto con Bolsonaro, entre los cuales figuran exministros y antiguos jefes militares.

El relator no llegó a proponer penas, que podrían sumar unos 40 años de prisión, las cuales serán discutidas en otras sesiones que la Primera Sala del Supremo tiene previsto realizar hasta el próximo viernes.

El juez recibió en su totalidad los cargos formulados por la Fiscalía General, que ha acusado a Bolsonaro y los otros reos de cinco delitos: intento de abolición violenta del Estado democrático de derecho, golpe de Estado, participación en organización criminal armada, daño cualificado y deterioro de patrimonio protegido.

Según la Fiscalía, la trama tenía como objetivo perpetuar a Bolsonaro en el poder tras los comicios de octubre de 2022, en los que aspiraba a la reelección, pero fue derrotado por el progresista Lula.

De acuerdo a los autos del proceso, dados por válidos por Moraes, los golpistas hasta idearon planes para asesinar a Lula y al vicepresidente electo, Geraldo Alkcmin, quienes serían ejecutados por seis oficiales del Ejército.

El relator acusó a la supuesta “organización criminal” liderada por Bolsonaro de haber promovido bloqueos de carreteras, protestas y campamentos frente a los cuarteles del Ejército en los que se pedía a las Fuerzas Armadas que impidieran la investidura de Lula.

Recordó que, de uno de esos campamentos, instalado en Brasilia, partió la marcha que concluyó con el asalto a las sedes de los tres poderes del Estado del 8 de enero de 2023, una semana después de la toma de posesión de Lula.

Bolsonaro recibió el apoyo de otros líderes de la ultraderecha global, entre ellos el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien ha aplicado aranceles del 50% a gran parte de los productos brasileños por un juicio que ha definido como una “caza de brujas” con uno de sus mayores aliados.

Además, Estados Unidos aprobó sanciones económicas contra el juez De Moraes y otros siete de los once miembros de la Corte Suprema de Brasil.