Morelia, Michoacán

En un incremento sin precedentes, el número de incendios forestales en Michoacán ha alcanzado la alarmante cifra de 251, afectando un total de 4 mil 270 hectáreas, según informó el director de la Comisión Forestal de Michoacán (Cofom), Rosendo Caro Gómez.

En conferencia de prensa desde Casa Michoacán, el funcionario estatal refirió que, en 50 años de experiencia en la materia, no había visto un comportamiento como el del mes de marzo.

Ante esta crisis, se han tomado diversas medidas, incluyendo acciones legales. Desde el año 2022, se han presentado un total de 80 denuncias criminales ante la fiscalía. Esta cifra se redujo a 44 en 2023 y se cuenta con 15 drones para agilizar las denuncias ante la Fiscalía General del Estado (FGE) en el presente año.

En cuanto al presupuesto destinado para combatir los incendios forestales, se reporta un aumento significativo. Mientras que en 2022 se asignaron 10.2 millones de pesos, en 2024 se ha incrementado a 15.3 millones de pesos. Actualmente, se encuentran activos 10 incendios distribuidos en 11 municipios.

Caro Gómez lamentó que aún no haya una conciencia generalizada entre la población propietaria de bosques sobre la importancia de cuidarlos, recordando que de ello depende el suministro de agua, la vida y la estabilidad climática.

Para hacer frente a esta crisis, se han desplegado un total de 123 brigadas, de las cuales 90 dependen de convenios entre Cofom y los ayuntamientos y comunidades autónomas. Además, se cuenta con 14 brigadas de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), 10 de Protección Civil, 4 brigadas rurales y 2 de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP). Adicionalmente, existen 3 brigadas municipales en Uruapan y Puruándiro.

En apoyo a estas brigadas, se han realizado aproximadamente 3 mil jornadas hasta la semana pasada, proporcionando hidratación y alimentos a brigadistas y organizaciones civiles que combaten los incendios.

Como parte de los esfuerzos de combate, se han puesto en funcionamiento dos helicópteros para el transporte de equipo y brigadistas, así como para realizar descargas de agua sobre los focos de incendio. Sin embargo, Caro Gómez señaló que estos recursos tienen sus limitaciones, que dependen del avance y la seguridad del equipo ante el incendio forestal.