El Consejo Nacional Electoral (CNE) solo ha presentado el resultado correspondiente al 80 % del escrutinio y sin aportar ninguna fuente ni sistema que permita su verificación.
Bruselas, Bélgica. La Unión Europea (UE) "exhorta al Consejo Nacional Electoral de Venezuela a que facilite el acceso inmediato a las actas de todas las mesas electorales", dijo este martes el alto representante de la UE para la Política Exterior, Josep Borrell.
"Hasta que se publiquen y verifiquen las actas, los resultados anunciados no podrán ser reconocidos", advirtió el jefe de la diplomacia europea en una declaración.
Borrell aseguró que sigue "con mucha preocupación" la situación en Venezuela después de las elecciones presidenciales del pasado domingo, en las que el ente electoral proclamo al presidente Nicolás Maduro como ganador de los comicios.
Hasta el momento, el Consejo Nacional Electoral (CNE) solo ha presentado el resultado correspondiente al 80 % del escrutinio, y sin aportar ninguna fuente ni sistema que permita su verificación, señala la declaración difundida por el alto representante.
"Con este resultado parcial, no verificable, el CNE ha procedido a declarar la victoria de Nicolás Maduro", dice Borrell, que añade que "en democracia, los resultados deben ser completos y poder ser verificados de manera independiente para ser reconocidos".
Por otra parte, continúa, "los datos que la oposición ha puesto al alcance del público ofrecen un resultado radicalmente diferente del anunciado por el CNE".
"Reitero que las autoridades de Venezuela deben garantizar la transparencia y la integridad del proceso mediante la verificación independiente de las actas de las mesas electorales", insiste el político español.
El máximo responsable de la diplomacia europea indicó que "el pueblo de Venezuela ha sufrido durante muchos años una crisis económica, política y social sin precedente" y recordó que la UE "ha defendido siempre que la vía para salir de esta crisis es la vía electoral y esa sigue siendo la solución".
En estos momentos difíciles, añadió, "es importante apelar a que las manifestaciones y protestas sean pacíficas".
"Las fuerzas de seguridad deben garantizar el pleno respeto de los derechos humanos, en particular los derechos de manifestación y de reunión", concluye la declaración.