La Unión Europea anuncia un incremento en los aranceles a los vehículos eléctricos chinos, siguiendo pasos de Estados Unidos

Europa.- Este 12 de junio de 2024 marcó un punto de inflexión en las relaciones comerciales entre la Unión Europea y China, con la UE elevando los aranceles a los automóviles eléctricos importados desde el gigante asiático. Esta medida, que entrará en vigor el 4 de julio, afectará a reconocidos fabricantes chinos como BYD, Geely y SAIC.

Estos aranceles estarán vigentes hasta noviembre, periodo que coincidirá con la culminación de un estudio de competencia. La UE, alineándose con Estados Unidos, sostiene que los subsidios otorgados por China a su sector automotriz generan una distorsión del mercado. Desde China, la respuesta no se hizo esperar, y el Ministerio de Asuntos Exteriores denunció la acción como proteccionista y alertó sobre repercusiones desfavorables para el continente europeo.

En Europa, fabricantes como Mercedes Benz y Stellantis manifestaron su inquietud ante posibles represalias por parte de China que podrían perjudicar sus ventas externas, pidiendo la supresión de barreras al comercio y un entorno de competencia equitativo. Por otro lado, la asociación de automóviles de China restó importancia a los nuevos aranceles, argumentando que su impacto sería marginal.

Este escenario se suma a la reciente medida de Estados Unidos de elevar los aranceles a los vehículos eléctricos de China, intensificando el clima de tensión en la guerra comercial con las potencias occidentales.

La investigación en curso ha revelado que la cadena de suministro de vehículos eléctricos a batería (BEV) en China ha disfrutado de apoyos estatales no competitivos, poniendo en riesgo la estabilidad económica de los productores de BEV en la UE. Frente a esto, la Comisión Europea ha establecido un protocolo y calendario para implementar medidas definitivas en respuesta a estas prácticas.