Morelia, Mich. | Acueducto Noticias.- Un fuerte sismo de magnitud 7.7 sacudió el viernes el centro de Myanmar y partes de Tailandia, dejando hasta el momento 1,644 muertos, 3,408 heridos y 139 desaparecidos.
La catástrofe ha provocado graves daños en la infraestructura de las ciudades afectadas, con la capital Naypyidó reportando la caída de su torre de control del aeropuerto.
Las labores de rescate continúan bajo condiciones muy difíciles debido a la destrucción de carreteras y puentes.
En Tailandia, la tragedia también dejó al menos 10 muertos, la mayoría en un rascacielos en construcción en Bangkok.
Los equipos de rescate siguen trabajando en el colapso de la estructura en el mercado de Chatuchak, mientras la esperanza se desvanece para las 78 personas desaparecidas bajo los escombros.
La tragedia ha unido a las naciones vecinas en un esfuerzo conjunto para llevar ayuda a las zonas más afectadas.
El gobierno de Myanmar, enfrentando complicaciones adicionales debido a su guerra civil, anunció un alto el fuego unilateral para permitir que los equipos de rescate lleguen a las áreas más devastadas.
Sin embargo, la situación sigue siendo crítica, especialmente con la falta de suministros médicos y la dificultad para acceder a las zonas de conflicto. La ONU ha destinado 5 millones de dólares para la asistencia inmediata, pero las condiciones en las zonas de desastre siguen siendo complejas.
Mientras tanto, países como China, Rusia e India han enviado equipos de rescate y ayuda humanitaria a la región afectada.
La comunidad internacional continúa movilizándose para brindar apoyo mientras la cifra de víctimas sigue aumentando.