El Congreso de Michoacán tiene pendiente emitir la legislación secundaria.

El inauguró este miércoles un proceso electoral histórico para la elección de juzgadoras y juzgadores del Poder Judicial, un evento sin precedentes en la entidad.

Sin embargo, este parteaguas en la democracia local llega acompañado de un cúmulo de incertidumbres y desafíos que ponen en tela de juicio la capacidad del sistema para garantizar un ejercicio transparente y apegado a derecho.

De acuerdo con lo que manifestaron las consejerías del IEM, el Congreso de Michoacán tiene aún pendiente la emisión de la legislación secundaria necesaria para establecer los lineamientos de este proceso extraordinario.

Este vacío normativo amenaza con generar inconsistencias y falta de claridad en aspectos clave, desde las campañas hasta la fiscalización de recursos.

El arranque del proceso electoral tuvo que concretarse por mandato constitucional sin embargo, los consejeros hicieron notar que no se cuenta con una reglamentación aplicable; no se sabe qué restricciones o criterios serán obligatorios para las candidaturas.

El presidente del IEM, Ignacio Hurtado Gómez, enfatizó que el instituto está “listo” para enfrentar este nuevo reto. Sin embargo, reconoció que el proceso exige un esfuerzo sin precedentes por parte del órgano electoral.

Entre los retos mencionados se encuentran la logística para imprimir boletas personalizadas, la instalación de urnas adicionales y la realización de campañas en condiciones de igualdad y legalidad, todo en un marco de tiempo reducido.

A pesar del optimismo mostrado por el consejo, la falta de un marco legal definido genera más preguntas que respuestas.

Proceso Electoral Judicial en Michoacán

A seis meses de la jornada comicial, el instituto opera bajo lineamientos generales, a la espera de que el Congreso del Estado cumpla con la emisión de las leyes secundarias en un plazo de 90 días.

Mientras tanto, los consejeros insisten en la necesidad de diseñar estrategias que permitan a la ciudadanía conocer a fondo a los candidatos, sus perfiles y su ideología jurídica, para evitar que la elección se reduzca a un ejercicio de mera formalidad.

Este proceso no solo pone a prueba la operatividad del IEM, sino que también reta a la sociedad michoacana a construir una nueva conciencia sobre el papel de las y los juzgadores.

En palabras de Hurtado Gómez, “por sus sentencias los conoceréis”, una frase que sintetiza la importancia de elegir a funcionarios que no sólo sean competentes, sino que también sean capaces de rendir cuentas a través de su actuar judicial.

La cuenta regresiva para el 15 de septiembre de 2025, cuando las y los nuevos jueces y magistrados tomarán protesta, ya comenzó.

Pero, a medida que el reloj avanza, las dudas sobre la capacidad del sistema para responder a este mandato constitucional siguen en el aire, dejando a Michoacán en una encrucijada democrática.