Dicho diversas organizaciones han acusado que la reforma formaliza la adscripción de la GN a la Defensa y su funcionamiento como Fuerza Armada.

Ciudad de México. La Cámara de Senadores aprobó este lunes, en lo general y en lo particular con cambios, el proyecto de decreto por el que se expide la Ley de la Guardia Nacional, fuerza de seguridad pública, y se modifican ocho ordenamientos para armonizarlos con la reforma constitucional en esta materia avalada en 2024.

La aprobación en lo general se obtuvo con 75 votos a favor y 34 en contra; mientras que, en lo particular, fue con 75 a favor y 32 en contra, por lo que el documento fue turnado al Ejecutivo Federal.

Fue el decimocuarto asunto que abordó esta cámara como parte de la agenda del Periodo Extraordinario del Congreso, que comenzó el pasado 23 de junio, y que en esta fecha coincide con el sexto aniversario de la creación de la Guardia Nacional.

El proyecto incluye reformas a diversas disposiciones de las leyes Orgánica de la Administración Pública Federal; Orgánica del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos; de Educación Militar del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos; y de Ascensos y Recompensas del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos.

Además, modificaciones a las leyes del Instituto de Seguridad Social para las Fuerzas Armadas Mexicanas; de Disciplina del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos; al Código de Justicia Militar; y al Código Militar de Procedimientos Penales.

El proyecto de decreto deriva de una minuta remitida por la Cámara de Diputados al Senado, el pasado 25 de junio, luego de que un día antes los diputados aprobaron la nueva Ley de la Guardia Nacional (GN), fuerza de seguridad pública, de carácter permanente e integrada por personal militar con formación policial dependiente de la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa).

La reforma, han dicho diversas organizaciones, formaliza la adscripción de la GN a la Defensa y su funcionamiento como Fuerza Armada, y en caso de delitos, podrá tener contacto con la evidencia antes que el Ministerio Público.

La actuación de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública han causado polémica en México por afrontar acusaciones de ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas y uso desproporcionado de la fuerza.

En los posicionamientos, el senador Enrique Vargas, del conservador Partido Acción Nacional (PAN), consideró que la reforma "no es la solución para la crisis de inseguridad, ya que no hay policías en más de 700 municipios y propuso desarrollar otra estrategia.

Mientras que por el otrora hegémonico Partido Revolucionario Institucional (PRI), la senadora Guadalupe Toledo recordó que diversos organismos internacionales no han estado de acuerdo con el "uso indebido" del Ejército, ni en contar con una Guardia Nacional sin auditorias ni controles democráticos.

En su turno, Clemente Castañeda, del partido Movimiento Ciudadano (MC), acusó que con esta reforma se renuncia al mando civil, se incrementan las acciones de discrecionalidad de la GN y no se incorporan mecanismos de rendición de cuentas.

Este lunes, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, reivindicó el papel de la Guardia Nacional (GN), organización creada por el expresidente Andrés Manuel López Obrador (2018-2024) hace seis años, como un pilar para la seguridad nacional.

Señaló que gracias al fortalecimiento de la GN, que cuenta ya con 130.000 agentes, en México se han reducido en un 25 % los homicidios dolosos durante los últimos nueve meses.

Durante el Gobierno de López Obrador creció la controversia en México por las políticas de militarización. El mandatario, quien prometió devolver los soldados a los cuarteles, justificó el uso de los militares en tareas de seguridad para enfrentar el crimen.