Descubre cómo se rompen las piñatas en Yucatán: una costumbre singular.
podría considerarse casi un territorio independiente dentro de México (de hecho, históricamente lo fue, pero esa es otra historia).
Poseen su propia bandera, prefieren las hamacas a las camas tradicionales, consumen chile habanero directamente y, curiosamente, en Yucatán rompen las piñatas sin utilizar palos.
Así como ustedes lo leen. En esta región, conocida por los panuchos y la sopa de lima, las celebraciones infantiles y las posadas tienen un giro único: las piñatas no se golpean con palos, sino que se atacan a puñetazos en un estilo colectivo y enérgico.
“Piñatas en Yucatán se rompen a puño limpio pero con bolsa en mano”
Esto se realiza con las manos desnudas o quizás protegidas con una simple bolsa de plástico, que sirve tanto para golpear como para recoger los dulces que caen.
Aunque pueda parecer extraño o incluso agresivo para quienes no son de la región, este método no ha reportado accidentes y resulta ser más ruidoso y divertido, con espectadores que participan activamente en la festividad.
Generalmente, las piñatas en Yucatán están hechas de materiales más blandos, como cartón ligero o papel maché, facilitando que se rompan con las manos.
Esta variante podría derivarse del espíritu comunitario y la preferencia por evitar accidentes con palos, especialmente en espacios pequeños o con muchos niños.
“Las piñatas en Yucatán, una tradición que hay que ver”
Además, las bolsas no solo protegen las manos durante el golpeo, sino que también ayudan a recolectar los dulces de manera eficiente.
Esta tradición es definitivamente una experiencia cultural que merece ser vista y vivida.