Morelia, Michoacán

El reproche de Alfonso Martínez no fue cualquier cosa: cuestionó, reprochó, criticó, condenó y anticipó lo que vendrá después de la aprobación de la reforma al Poder Judicial, es elinicio de la democracia simulada en México y “por supuesto que duele”.

Martínez Alcázar fue abordado este miércoles sobre lo ocurrido durante la noche y madrugada, cuando el Senado de la República validó la propuesta presidencial que, si bien es necesaria, no así el proceso mediante el cual se lleva a cabo.

Con esta reforma, citó, a cargo de morena y aliados, “México comienza una etapa de democracia simulada. Una división de poderes simulada”, en un acto donde el partido en el poder se encumbró denostando al PRI y “hoy hace exactamente lo mismo que lo peor de ese partido”.

En la entrevista colectiva, donde dejó en claro que continuará levantando la voz siempre que se atente de esta manera contra la democracia -“espero poder seguir levantando la voz”-, “el Ejecutivo tiene el control absoluto del legislativo y ahora del judicial, citó y se despidió la autonomía de poderes en México, de la república misma.

Dijo que lo sucedido en la llamada Cámara Alta, sólo revela que la citada reforma “nació muerta, pues para juntar los votos suficientes debieron ofrecerle el perdón a uno de los senadores de oposición, de manera que todos los temas legales que arrastraba ahora serán borrados como premio a su voto”, refirió.

Martínez Alcázar condenó lo anterior, al agregar que, mientras a un senador le aplican una justicia selectiva por estar a favor del régimen, a otros los secuestran para evitar que acudan a la cámara y expresar su voto en contra.

El alcalde de Morelia fue más allá, al señalar que, con lo ocurrido, el escenario que ofrece México al mundo es de incertidumbre y que ello se verá reflejado en la siguiente evaluación crediticia, en la que “seguramente el país tendrá números muy bajos y ello provocará la fuga de inversiones (y no es que quiera que nos vaya mal, es que así va a suceder”.

Alfonso Martínez comentó que todo lo que criticaba morena del viejo PRI, ahora son prácticas comunes del partido guinda, al mostrarse como un partido intolerante y que aprovechar su mayoría para aplastar y corromper a la oposición.