Morelia, Michoacán, 28 de octubre de 2024.- “Reforestar no es por moda o por pose, lo hacemos de corazón”, afirmó Marco Tulio Campos Vargas.

En la etapa final de la temporada de lluvias y ciclones, el líder de Fuerza Generacional Ciudadana recalcó el interés de la asociación civil a su cargo por los temas forestales.

Marco Tulio Campos recordó que “en Morelia tenemos una superficie de 119 mil hectáreas, de las cuales 28 mil están en proceso de degradación forestal por diversos factores; más en el sur del municipio”.

Indicó que de las antes mencionadas 50 mil hectáreas tienen vocación forestal en la capital michoacana, ya sean áreas de coníferas, bosque, selva baja y bosques urbanos.

Recordó que en los últimos 10 años Morelia ha sido uno de los municipios más afectados por los incendios forestales y recalcó la necesidad de fortalecer convenios de operación entre autoridades de los tres órdenes de gobierno (incluyendo CONAFOR y COFOM), con la participación de la sociedad civil.

Campos Vargas destacó que a lo largo de casi 13 años de existencia, Fuerza Generacional Ciudadana ha participado en diversas campañas de reforestación con autoridades y otras organizaciones de la sociedad civil organizada, sumando esfuerzos en la plantación de alrededor de 3 millones de arbolitos, sólo en Morelia.

“Algunos dicen ‘Marco y sus arbolitos’ o ‘Marco el reforestador’, pero no saben el oro que es tener en la actualidad un árbol”, indicó tras recordar que desde los 14 años de edad participa activamente en acciones de reforestación, tanto en las zonas rurales como en las urbanas.

“Reforestar no es sólo ir a plantar un árbol insignificante; muchos plantan árboles de buen tamaño, pero no los cuidan, pero plantar es un orgullo para mi decir que lo he hecho y lo he impulsado”, abundó.

Marco Tulio Campos manifestó: “Hablar de reforestaciones no es sólo algo vacío para mí, sino que es convivencia humana, infundir en el ciudadano, en el ser humano, el amor por la naturaleza”.

“La convivencia con las personas y ver que muchas personas van por primera vez a reforestaciones y dicen ‘¿a poco así se hace un bosque?’, o ‘¿a poco los árboles dan agua?’, o ‘¿a poco es muy importante un árbol?; y sí despejar todas sus dudas, pero en el sitio de la reforestación haciéndolo con ellos y plasmando con verdad lo que es plantar un árbol, eso es un verdadero amor por la reforestar», concluyó.