Morelia, Michoacán

La Unidad Deportiva de Solidaridad se convirtió en el escenario para el cuarto y último cierre de campaña del candidato a la alcaldía moreliana de Morena y compañía, Carlos Torres Piña, quien vaticinó su triunfo a partir del pulso que le da un cuarto de siglo en campañas.

Torres Piña presentó a cada miembro de su planilla, su voz ya afónica pero persistente, agradeciendo a sus seguidores por su apoyo durante los 45 días de campaña. “Se siente el triunfo”, declaró, rememorando los recorridos y las caras conocidas que había visto a lo largo de su travesía electoral.

En su discurso, no escatimó en críticas hacia las campañas de desprestigio contra AMLO, acusando a la derecha de querer mantener sus privilegios a costa del bienestar de la gente. Invitó a todos a votar el 2 de junio, destacando los logros de AMLO y la necesidad de continuar con el proyecto de nación.

Habló sobre la necesidad de rescatar Morelia, de ofrecer obras reales a las colonias abandonadas y sin servicios públicos. Señaló que con casi 400 millones de pesos invertidos en el gobierno de Alfonso, se podrían haber pavimentado 300 calles, pero la derecha, dijo, favorece a unos pocos. Prometió gobernar del lado del pueblo, asegurando agua, seguridad y la regulación de predios.

Al final de su discurso, Torres Piña recordó su experiencia de 25 años coordinando campañas, mencionando la maratónica campaña de 30 días del actual gobernador de Michoacán, que resultó en una victoria. “Esta no será la excepción”, afirmó con determinación.

Con el final del evento, la gente comenzó a dispersarse, buscando sus camiones. Los vecinos de Solidaridad, curiosos, se asomaban desde sus casas por la multitud y el bullicio. A lo lejos, veían el escenario y buscaban la cara del candidato que, entre abrazos y sonrisas, se despedía de sus simpatizantes, cerrando así una día más de su campaña electoral.

Antes de que Torres Piña tomara la palabra, el micrófono pasó a Marco Polo Aguirre, candidato local por el Distrito 10 y su coordinador de campaña. Aguirre, con voz enérgica, intentó animar a la multitud mientras los camiones esperaban para llevar a los asistentes de vuelta a sus hogares. La multitud, una mezcla de esperanza y cansancio, escuchaba atentamente, algunos más interesados en los discursos, otros esperando ansiosos el final del evento.

Las críticas a las obras de Alfonso, el actual alcalde, se oían entre los murmullos. Torres Piña prometió mejoras significativas en los distritos de Prados Verdes y Eduardo Ruiz, asegurando que estas áreas serían ejemplo de su administración. Las promesas de infraestructura resonaban con fuerza entre aquellos que sienten que sus necesidades básicas han sido ignoradas.

El evento tuvo un aire barroco, una mezcla de emoción desbordante y melodrama. Las elecciones se acercan y Torres Piña no perdió la oportunidad de invitar a la gente a votar este 2 de junio.

“Las elecciones son emoción”, ha explicado el analista Antonio Sola, y ciertamente, el cierre de campaña lo demostraba. La música, las risas y los cánticos resonaban, elevando los ánimos de la multitud que respondía con gritos y aplausos.