La aprehensión de Rey David Santiago Vargas genera incertidumbre al registrarse sólo cinco días después de que Raúl Carrasco Lechuga fuera abatido en Eldorado
Redacción / La Voz de Michoacán
Culiacán, Sinaloa. Este viernes se dio a conocer que durante las primeras horas del jueves 27 de junio, habitantes de Culiacán despertaron con las calles llenas de agentes federales que desplegaron un operativo que tuvo como objetivo la aprehensión de un presunto operador del Cártel de Sinaloa: Rey David Santiago Vargas.
El Oso, como es mejor conocido en el hampa del país, fue detenido luego de que las fuerzas federales realizaron patrullajes con unidades blindadas tipo Rhino y helicópteros, así como cateos a inmuebles de la colonia Miguel Hidalgo y el fraccionamiento Hacienda de La Mora.
"De 1.65 metros de estatura, complexión media, tez morena, cabello corto castaño oscuro, usa lentes, barba escasa, viste playera blanca, short de mezclilla, zapato deportivo negro con blanco. Tiene dos tatuajes en los hombros y parte del pecho, los cuales hacen alusión a la Santa Muerte y una calavera", se describe en el Registro Nacional de Detenciones emitido por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
El estatus del detenido permanece en traslado y no se especificó cuál es la autoridad que lo tiene a disposición. Pese a ello, la aprehensión de Rey David Santiago Vargas ha comenzado a generar incertidumbre no solo en Sinaloa sino en el resto del país al registrarse tan solo cinco días después de que Raúl Carrasco Lechuga fuera abatido en Eldorado.
El Chore y El Oso no solo estaban vinculados con la facción del Cártel de Sinaloa que encabezan los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, sino que también eran cuñados.
El rol del Oso en el Cártel de Sinaloa
Aunque el nombre de Rey David Santiago Vargas no forma parte de la veintena de socios y colaboradores que fueron acusados junto a Los Chapitos en abril de 2023 ante una corte federal de Estados Unidos, su importancia en la organización delictiva se remonta a décadas atrás.
Prueba de ello fue su detención en octubre de 2016 cuando la Secretaría de Marina (Semar) lo ubicó como un presunto jefe de plaza del Cártel de Sinaloa, en específico, de la facción que en aquellos años encabezaba Dámaso López Núñez.
Supuestamente, El Oso era el encargado de coordinar su lucrativo negocio en diversos puntos de Sinaloa y de Baja California Sur, un puesto que habría alcanzado tras años de trabajar para El Licenciado.
De forma extraoficial trascendió que El Oso y su hermano -identificado únicamente como El Osito- habrían estado detrás del levantón de Juan Guzmán Rocha -primo de El Chapo- y de José Miguel Bastidas, alias El Güero Bastidas, cuyos cuerpos fueron localizados en diciembre de 2011 en un paraje rumbo a Navolato.
Se presume que la ejecución de ambos socios del Cártel de Sinaloa fue ordenada por Joaquín Guzmán Loera ante la posibilidad de que Juancho estuviera filtrando información de la organización a las autoridades a cambio de beneficios propios, pues para entonces ya contaba con cargos en Estados Unidos.
Dicho episodio fue confirmado por el mismo Dámaso López Núñez años después durante las declaraciones que hizo ante la fiscalía estadunidense en su calidad de testigo en el juicio que El Chapo enfrentó en Nueva York.
Los Chapitos contra El Licenciado
El nombre de Dámaso López Núñez comenzó a cobrar relevancia en el hampa del país luego de que Joaquín Guzmán Loera se fugó por primera vez del Penal de Puente Grande en Jalisco en enero de 2001.
Sólo unos meses después de aquella hazaña que puso a El Chapo en el ojo de la opinión pública, El Licenciado presentó su renuncia como jefe de seguridad de la prisión para comenzar a formar parte de las filas del Cártel de Sinaloa.
Información recabada por InSight Crime apunta a que Dámaso López Núñez se convirtió en la mano derecha del Chapo Guzmán y se involucró en actividades relacionadas al narcotráfico, lo que poco a poco lo consolidó como una figura prominente de la organización delictiva.
El poder que El Licenciado acumuló incluso lo llevaron a ser considerado como el sucesor de Joaquín Guzmán Loera luego de que fuera detenido de forma definitiva en enero de 2016, una posibilidad que Los Chapitos no estaban dispuestos a permitir.
En alianza con Ismael El Mayo Zambada, los hijos de El Chapo que heredaron su negocio criminal desataron una violenta embestida en contra Dámaso López Núñez y su gente, incluido su hijo Dámaso López Serrano, alias El Mini Lic.
En aquellos años, El Oso continuaba trabajando para Los Dámaso, sin embargo, la pugna que protagonizaban dio un revés luego de que en mayo de 2017 Dámaso López Núñez fue aprehendido en la Ciudad de México por elementos de la Procuraduría General de la República (PGR).
Sobrepasado por el poder e influencia de Los Chapitos, el Mini Lic se convirtió en el miembro de más alto rango del Cártel de Sinaloa en entregarse a agentes de la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) en julio de 2017.
El Licenciado fue extraditado a Estados Unidos un año más tarde y en vísperas de que en la Corte de Brooklyn arrancara el juicio en contra de El Chapo Guzmán. Tanto El Licenciado como su hijo Dámaso López Serrano llegaron a acuerdos de culpabilidad y se convirtieron en testigos cooperantes de la justicia estadunidense.
Las detenciones del Oso y su cambio de bando
Tras haber sido aprehendido por primera vez en 2016, bajo las reservas de ley a El Oso se le concedió llevar su proceso en libertad. Una vez que regresó a las calles y con Los Dámasos perdiendo la batalla frente a Los Chapitos, comenzó a trabajar para los hijos de Joaquín Guzmán Loera.
En octubre de 2017, Milenio reportó que efectivos de la Policía Federal habían logrado aprehender nuevamente a Rey David Santiago Vargas, no obstante, en dicha ocasión ya era identificado como un operador de los hermanos Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar.
Su detención se llevó a cabo en Hermosillo, Sonora y se le señaló de ser el presunto responsable de coordinar a las células delictivas que operaban en Eldorado, Mezquitillo y Sánchez Celis, las cuales tenían como función el vigilar las actividades de las autoridades pero también coordinar economías criminales como la extorsión o agresiones a grupos rivales.
El Oso fue aprehendido nuevamente luego de que se girara una órden de aprehensión en su contra por su presunta responsabilidad en el delito de portación de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército Mexicano y en el uso de documentos apócrifos.
A diferencia del primer fallo legal que permitió su liberación en 2016, se desconoce cómo fue que Rey David Santiago Vargas volvió a las calles tras su reaprehensión en 2017. De forma extraoficial se ha comentado en medios de comunicación locales que fue uno de los presos que logró fugarse del Penal de Aguaruto durante el operativo fallido que las Fuerzas Armadas desplegaron para aprehender a Ovidio Guzmán López en octubre de 2019.
Aunque dicha versión no ha sido confirmada, El Oso se encuentra nuevamente bajo el resguardo de las autoridades mexicanas un hecho que, junto al abatimiento de El Chore, vislumbra las tareas que se han desplegado en contra de la facción del Cártel de Sinaloa que encabezan los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán y sus más cercanos colaboradores.