No le aprecio el castigo que le dieron sus padres adoptivos.

Su enojo por el castigo impuesto por sus padres en contra de él, llevo a adolescente a matarlos de un disparo y entre ellos también le quito la vida a su hermana.

Fue en Brazil donde este caso de asesinato ha dejado consternado a todo el país pues un adolescente mató a su familia entera luego de que sus padres lo regañaran y le quitaran el celular como castigo según dijo el menor de 16 años quien fuese el responsable de tal atrocidad.

En el relato del asesino, mencionó que las discusiones con sus padres adoptivos no eran ajenas en su día a día, pues eran muy recurrentes entre la familia, una de las ultimas discusiones sucedió el pasado 16 de mayo donde los mayores lo habían llamado «vagabundo» y fue ahí cuando la molestia del joven rebasó los limites pues desde esa ocasión planifico el homicidio de su familia entera.

Un día después de la discusión, el 17 de mayo, el adolescente robó la pistola de su padre, una vez teniendo el arma bajo su disposición incluso comentó que llegó a probarla disparando al aire.

Así pues, el día del crimen habría llegado para el joven quien luego de llegar de la escuela junto a su padre, le disparo al interior de la casa donde se encontraba también su hermana. La joven a alertada por el estruendo acudió a la habitación donde se encontraba su hermano y apenas entró a la habitación el menor le proporcionó un disparo en la cara dejándola muerta al instante.

Pasaron unas horas hasta que la madre llegó a su domicilio, su hijo le abrió la puerta y al entrar, se encontró con los cuerpos de su familia baleados en el suelo pero no fue mucho el tiempo en que apreció la escena pues el asesino le disparo por la espalda poco antes de reaccionar a lo que había visto.

Tras haber matado a su familia, el menor siguió haciendo su vida durante el fin de semana mientras convivía con los cuerpos de sus familiares sin vida al interior de su casa, según se dijo el joven salió al gimnasio y e hizo su despensa como normalmente lo haría cualquier persona.

Fue hasta el 19 de mayo que decidió confesar ante la policía militar de Brazil y luego fue trasladado a un centro de reclusión para menores en la capital.

Fuente: ALERTAMUNDIAL