La mexicana liberada por Hamás, Ilana Gritzewsky, narró su cautiverio y pide fin a la guerra
Ilana Gritzewsky experimenta una sensación de ahogo y temblores cada vez que recuerda su secuestro por Hamás y su subsiguiente cautiverio en los túneles de Gaza. A pesar del trauma, está decidida a compartir su historia porque siente que ‘el mundo se está olvidando de que hay 101 secuestrados que cada segundo que pasa pueden morir’.
Mexicana liberada por Hamás
A sus 30 años, tanto Ilana como su novio Matan Zangauker, quienes poseen ciudadanía mexicana e israelí y residen en Israel, fueron capturados el 7 de octubre de 2023 durante un ataque de Hamás que dejó un saldo de más de 1,200 muertos y 250 rehenes.
Tras 55 días de cautiverio, Ilana fue liberada gracias a una tregua entre Israel y Hamás establecida hace un año, pero su novio y varios amigos continúan retenidos.
‘Estoy aquí para alzar la voz por mi novio y por mis amigos y para que todo el mundo sepa qué nos pasó a los que fuimos secuestrados y todos recuerden que todavía hay ciudadanos civiles inocentes en manos de un grupo terrorista’, compartió Ilana durante su visita a Madrid para el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
‘Mi pueblo quiere que la guerra acabe a cambio de la vuelta de los rehenes’, afirmó Ilana, quien, sin embargo, evitó hablar de política. Su mensaje es claro y lo dirige a todos, tanto civiles como políticos, para que comprendan el sufrimiento de los secuestrados.
Ilana recuerda la brutalidad de su secuestro y los días de horror en los túneles de Gaza. A pesar del dolor, logra describir cómo fue arrastrada a una motocicleta y llevada a Gaza ‘como un trofeo’, sufriendo graves lesiones.
Durante su cautiverio, fue trasladada constantemente, golpeada y torturada, viviendo en constante terror de ser interrogada o peor.
Después de 55 días en condiciones inhumanas, fue liberada, pero su corazón permaneció con su novio y sus amigos aún retenidos.
‘No estaba dispuesta a irme sin ver a mi novio. Sabía que si me iba, mi cuerpo iba a salir, pero mi alma se iba a quedar ahí con él y con mis amigos’, confiesa. A pesar de su liberación, la pesadilla continúa para muchos, y Ilana insiste en que ‘cada segundo que pasa pueden morir’.