El yogurt es un alimento lácteo obtenido a base de la fermentación de las bacterias Lactobacillus y Streptococcus. Este producto es muy consumido debido a que suele ser una alternativa saludable e ideal para el desayuno debido a sus ingredientes nutritivos.
Por lo fácil que es producir este alimento, existen muchas marcas en el mercado; sin embargo, tras un análisis hecho por la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), reveló que una marca de yogurt no es conveniente para el consumo.
El análisis reveló que 250 gramos del yogur Lala Fresa contienen 26.8 gramos de azúcares, equivalentes a casi 5.5 cucharadas cafeteras de azúcar. Este nivel representa el 53.6% de la ingesta diaria recomendada para adultos y el 67% para niños, de acuerdo con las directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Además, la organización El Poder del Consumidor, en colaboración con la Profeco, ha emitido una advertencia sobre este yogurt que contiene aditivos y niveles excesivos de azúcares, ya que gracias a los análisis realizados también se detectó la presencia de jarabe de maíz de alta fructosa (JMAF) en el yogur, un endulzante que tiene efectos negativos documentados para la salud, tales como:
- Hipertrigliceridemia (altos niveles de grasa en sangre)
- Hipercolesterolemia (colesterol elevado)
- Hiperuricemia (niveles altos de ácido úrico)
- Hipertensión (presión arterial alta)
- Hígado graso
- Gota
- Resistencia a la insulina
Por último los resultados registraron que este yogurt contienen 16 ingredientes, de los cuales dos aditivos han suscitado inquietudes de salud que puede terminar en consecuencias graves. Estos son:
Carragenina: Un aditivo natural que se ha asociado con inflamación intestinal, sangrado y cáncer de colon.
Rojo Allura (Rojo 40): Un colorante vinculado a hiperactividad y déficit de atención en niños, así como inflamación del colon y daños en el ADN en modelos animales.
