Los temas principales que ambos van a abordar son los aranceles que Trump ha amenazado con imponer a los productos procedentes de la Unión Europea.
París, Francia.- El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, fue recibido este sábado en el Palacio del Elíseo por el jefe del Estado francés, Emmanuel Macron, poco antes de que acuda el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ambos invitados para las ceremonias de reapertura de Notre Dame.
Trump llegó con más de 40 minutos de retraso sobre el horario previsto, que era las 16.00 locales (15.00 GMT), al patio del Elíseo, donde estaba esperándole para rendirle honores la Guardia Republicana.
Macron bajó las escaleras y fue a recibirlo efusivamente para darse las manos y saludar a las cámaras, antes de que los dos mandatarios entraran en el edificio.
Los temas principales que ambos van a abordar son los aranceles que Trump ha amenazado con imponer a los productos procedentes de la Unión Europea, la guerra en Oriente Medio y, sobre todo, la invasión rusa de Ucrania.
De hecho, Zelenski tiene cita con Macron a partir de las 17.00 locales (16.00 GMT), lo que abre la posibilidad de un encuentro entre los tres.
La coincidencia de Trump con Zelenski en la capital francesa es una oportunidad para el presidente ucraniano, que tiene interés en aclarar los planes del nuevo inquilino de la Casa Blanca, que durante la campaña electoral dijo que quería una solución en 24 horas para el conflicto entre Rusia y Ucrania.
En unas breves palabras ante las cámaras en su encuentro cara a cara, Macron dijo al presidente electo de Estados Unidos que era "un honor para los franceses que esté aquí".
Recordó la "solidaridad" que había mostrado Trump en abril de 2019 cuando se incendió la catedral de Notre Dame.
El próximo dirigente estadounidense, por su parte, señaló que tiene "una excelente relación" con Macron, que "el pueblo francés es formidable" y que "es un honor estar aquí".
Trump y Zelenski van a estar en la ceremonia que va a presidir Macron a partir de las 18.15 horas (17.15 GMT) para celebrar la reapertura de Notre Dame tras las obras de restauración por el grave incendio que destruyó parcialmente la catedral el 15 de abril de 2019.