Tres años después de un crimen que conmocionó a la provincia de Buenos Aires, Nora Marta Lozano ha sido condenada a prisión perpetua por el asesinato de su hijastro, Jorge Scali, un hombre con discapacidad visual e intelectual que vivía bajo cuidados especiales.
El juicio, que concluyó esta semana, confirmó lo que la fiscalía describió como un “crimen premeditado y despiadado”. Según el expediente, Lozano, de 61 años, retiró a Scali del centro geriátrico donde residía y lo llevó a una zona rural, donde lo atacó con un arma blanca; el cuerpo fue hallado semanas después con más de 25 puñaladas.
La historia comenzó a desmoronarse cuando los investigadores allanaron su vivienda; en el lugar hallaron dos armas de fuego cargadas y listas para ser utilizadas, sin permisos de portación. Sin embargo; este hallazgo encendió las alarmas de la fiscalía, que intensificó las investigaciones.
El análisis forense posterior confirmó que Scali había muerto por múltiples heridas punzocortantes, y las pruebas vincularon a Lozano directamente con el homicidio.
Tras meses de investigaciones y audiencias, el tribunal dictó una condena firme: cadena perpetua por homicidio agravado, además de los delitos de falsa denuncia y tenencia ilegal de armas.
La sociedad bahiense ha seguido de cerca este caso, que pone sobre la mesa los desafíos del sistema de cuidados, la protección de personas vulnerables y los mecanismos de control para evitar tragedias de esta naturaleza.
Fuente: El Heraldo de México