Washington, EU, 23 de septiembre de 2024.- El gobierno de Joe Biden, presidente de Estados Unidos, propuso prohibir la venta e importación de vehículos que contengan partes y componentes tecnológicos particulares originados en China y en Rusia, anunció la Casa Blanca.
“El anuncio del presidente Biden es para tomar acciones fuertes y proteger a Estados Unidos de riesgos a la seguridad nacional asociados y ligados a tecnología vehicular procedentes de países de preocupación”, señala la Casa Blanca en un comunicado de prensa.
La medida de prohibición formulada por el Departamento de Comercio matiza que la industria automotriz de China busca dominar el mercado global y de Estados Unidos, lo cual representa nuevas amenazas a la seguridad nacional y a las cadenas de suministro.
“El gobierno del presidente Biden y de la Vicepresidente (Kamala) Harris están comprometidos a garantizar que nuestras cadenas de suministro vehicular estén seguras y sean resilientes a las amenazas extranjeras”, resalta el comunicado de la Casa Blanca.
Desde febrero y luego, el 1 de marzo de este año, el Departamento de Comercio había recomendado al presidente Biden imponer la prohibición a la compra de vehículos con partes y tecnología sobre todo de China y Rusia, tras realizar una evaluación de amenaza a la seguridad nacional y efectos a la industria automotriz estadunidense.
Específicamente el Departamento de Comercio apunta que los vehículos electrónicos con tecnología china y rusa de auto navegación representan una nueva y creciente amenaza para los consumidores estadunidenses y de todo el mundo.
“Estas tecnologías incluyen un sistema computarizado que controla los movimientos del vehículo y recolecta información sensible del conductor y los pasajeros, al igual que cámaras y sensores para el manejo automático que permiten grabar y almacenar detalles sobre la infraestructura de Estados Unidos”, alerta la Casa Blanca.
Este tipo de espionaje vehicular funciona porque “ahora más que nunca los vehículos están conectados a las redes digitales”, agrega el anuncio.
Como referente a la propuesta de Biden, la Casa Blanca recuerda que en mayo pasado el mandatario aumentó de 25 a 100% las tarifas de arancel a los automóviles eléctricos de China, esto bajo el argumento del impuesto se determinó para proteger a la industria estadunidense.
Los componentes chinos y rusos a los que Biden atañe el espionaje, son los sistemas de Bluetooh, celular, satelital y módulos de Wi-Fi además de la tecnología para el sistema conducción automatizada de vehículos sin la necesidad de un chofer.
En una apartado que podría afectar a México, el Departamento de Comercio también propone que haya ciertas excepciones respecto a la prohibición, para pequeños productores de vehículos con el objetivo de evitar una ruptura innecesaria en la industria automotriz.
La prohibición anunciada por el gobierno de Biden entraría en efecto para los modelos de autos 2027, mientras que la referida para las tecnologías de hardware se aplica a los modelos 2030 o a partir del 1 de enero de 2029.
La Casa Blanca agregó que el Departamento de Comercio sigue finalizando los detalles de la decisión final sobre la prohibición, por lo que recomendó que los accionarios de la industria automotriz interesados pueden compartir con el gobierno de Biden sus preocupaciones y observaciones.
“El gobierno de Biden continuará llevando a cabo consultas cercanas con la industria, los países aliados, socios y accionistas durante el proceso regulatorio para garantizar al máximo la protección a la seguridad nacional y minimizar las consecuencias involuntarias a la ruptura en la cadena de suministro”, anotó la Casa Blanca. (CON INFORMACIÓN DE: PROCESO)