El cardenal Fridolin Besungu Ambongo, arzobispo de Kinshasa (República Democrática del Congo) y fraile capuchino de 65 años, aparece entre los nombres que suenan para un futuro cónclave. Reconocido en África por su firme oposición a la corrupción y a los señores de la guerra, también ha destacado por sus posturas conservadoras en temas de moral sexual.
A finales de 2023, Ambongo lideró la respuesta africana a la declaración vaticana Fiducia supplicans, que permitía la bendición de parejas del mismo sexo. El cardenal redactó una carta de siete páginas rechazando el documento y viajó personalmente a Roma para manifestar su desacuerdo al papa Francisco. “En África no existe la homosexualidad”, declaró entonces.
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Aunque su elección sería vista como un hito simbólico —el primer papa africano moderno—, algunos sectores dentro del Vaticano evalúan con cautela esta posibilidad, debido a la rigidez moral del episcopado africano.
En contraste, el cardenal italiano Pietro Parolin, actual secretario de Estado del Vaticano y figura clave en el acercamiento de la Iglesia a África y Asia, encabeza algunas encuestas como candidato de consenso.
La sucesión de Francisco abriría así un escenario complejo donde se combinan tradición, geopolítica y simbolismo en la elección del próximo líder de la Iglesia católica.
Fuente: EL PAIS
