FIFA enfrenta denuncia ante Comisión Europea por su gestión abusiva en la organización y saturación de calendarios de fútbol
Las principales ligas de fútbol de Europa y la Federación Internacional de Futbolistas Profesionales (FIFPro) han presentado una denuncia contra la FIFA ante la Comisión Europea, acusándola de abusar de su posición dominante al determinar los calendarios de competiciones internacionales.
En un comunicado oficial, los demandantes argumentan que: “La queja explica cómo la imposición de decisiones sobre el calendario internacional por parte de la FIFA es un abuso de posición dominante e infringe la legislación de la Unión Europea. La jurisprudencia reciente (…) deja claro que la FIFA debe ejercer sus funciones regulatorias de forma transparente, objetiva, no discriminatoria y proporcionada para neutralizar su conflicto de interés”, destacaron los demandantes en un comunicado.
Durante una conferencia de prensa en Bruselas, titulada “Protegiendo la salud de los futbolistas y salvaguardando la sostenibilidad de las ligas nacionales en Europa contra la conducta abusiva de la FIFA”, representantes de FIFPro Europe, LaLiga de España y la Premier League, entre otros, criticaron a la FIFA por no colaborar con las ligas nacionales para planificar los calendarios de competiciones internacionales.
Javier Tebas, presidente de LaLiga, cuestionó el manejo de FIFA y UEFA, señalando que: “hagan un uso adecuado de una posición que el TJUE (Tribunal de Justicia de la Unión Europea) ha reconocido como un monopolio” y afirmó que ambas instituciones están cometiendo un abuso de posición dominante.
“Queremos un proceso transparente, queremos acuerdos y no sólo consultas, queremos un calendario que sea sostenible para los jugadores y las ligas domésticas”, expresó Mathieu Moreuil, director de relaciones internacionales de la Premier League, lamentando la falta de respuesta positiva de la FIFA al intentar dialogar.
La demanda presentada busca que la FIFA sea obligada a adoptar un “proceso de toma de decisiones justo e inclusivo” que proteja el bienestar y los derechos de los jugadores, así como la viabilidad de las ligas nacionales.
Alfonso Lamadrid, portavoz del equipo legal de la demanda, describió el caso como “un ejemplo de libro de texto de un comportamiento de abuso de dicha posición dominante”, enfatizando que los partidos organizados por la FIFA impactan desproporcionadamente a las ligas nacionales y al ecosistema del fútbol en general.