Está familia cada ocho días se hace presente, teniendo en memoria a los que ya no están entre nosotros, mismos que recuerdan con platillos que degustaban en vida, así como el decorar donde están sepultados con flores de cempasúchil.
Morelia Mich.- La familia Pérez es un ejemplo de amor y dedicación hacia sus seres queridos que ya no están entre nosotros. Cada ocho días, sin falta, visitan la tumba de sus familiares en panteón municipal, y en el Día de Muertos, la decoran con flores, velas y objetos que reflejan la personalidad y gustos de cada uno.
Está familia cada ocho días se hace presente, teniendo en memoria a los que ya no están entre nosotros, mismos que recuerdan con platillos que degustaban en vida, así como el decorar donde están sepultados con flores de cempasúchil y el limpiar la lápida que día con día hace estragos por el pasar del tiempo.
«Para nosotros, el Día de Muertos es una oportunidad para recordar y honrar a nuestros seres queridos que ya no están con nosotros», comenta la señora Pérez. «Es un momento para compartir historias, recuerdos y risas, y para asegurarnos de que su memoria vive en nuestros”.
La familia Pérez cree que recordar a los que ya no están es fundamental para, mantener viva su memoria y legado, así como el honrar su amor y dedicación, también el enseñar a las nuevas generaciones sobre la importancia de la familia y la tradición.
«Es importante recordar a nuestros seres queridos porque ellos fueron parte de nuestra vida y nuestra historia», afirma el señor Pérez. «Su ausencia deja un vacío, pero su recuerdo nos llena de amor y gratitud».
La familia se esmera en decorar la tumba con flores frescas y artificiales, así como con velas y luces, y lo más importante fotos y objetos personales, esto es un claro ejemplo de cómo recordar y honrar a nuestros seres queridos que ya no están entre nosotros. Su dedicación y amor son un testimonio de la importancia de mantener viva la memoria y la tradición. En el Día de Muertos, recordemos a nuestros seres queridos con amor y gratitud.