Palmieri entró en la música afrolatina de Nueva York antes del boom de la salsa como género consolidado. Vio nacer al fenómeno Fania en los años 70
San Juan, Puerto Rico. El reconocido pianista y compositor salsero de origen puertorriqueño Eddie Palmieri falleció este miércoles a los 88 años de edad a causa de un infarto.
Nacido el 15 de diciembre de 1936 en Nueva York, de padres puertorriqueños, Palmieri fundó varias bandas como La Perfecta, fue uno de los pioneros de la salsa y ganó tres Premios Grammy.
Varios de sus colegas músicos, entre ellos Bobby Cruz y La India, lamentaron su fallecimiento en mensajes en redes sociales, en los que destacaron también su legado en la música latina.
“Hoy con mucho pesar confirmo que el gran Eddie Palmieri se nos fue. Ya nada puede ser igual en la música. De los grandes, el más grande. Gracias por tanto, un abrazo para la familia”, escribió el vocalista Bobby Cruz en sus redes sociales.
Palmieri fue el ganador de diez premios Grammy, el premio NEA Jazz Masters y un premio por la vida de la Academia Latina de la Grabación, entre muchos otros honores. Pero el legado de Eddie Palmieri va mucho más allá de los premios. Fue un mentor, un profesor y un incansable defensor de la música y la cultura latina. Inspiró a generaciones de músicos y conmovió a incontables oyentes con su arte, convicción y sonido inconfundible.
Palmieri alcanzó la fama a la par de su hermano, Charlie, compartiendo ambos el oficio al frente del piano, pero forjando cada uno su propia estela. Eddie fundó en 1961 la orquesta La Perfecta, por la que pasaron figuras salseras como el cantante Ismael Quintana, el percusionista Manny Oquendo (fundador del Conjunto Libre) y el trombonista Barry Rogers.
En producciones como “Champagne” (1968) participaron con su orquesta músicos como Cheo Feliciano y los cubanos Cachao López y Alfredo “Chocolate” Armenteros.
Palmieri entró en la música afrolatina de Nueva York antes del boom de la salsa como género consolidado. Vio nacer al fenómeno Fania en los años 70 y grabó con el sello trabajos como “The Sun of Latin Music” (1974) y “Unfinished Masterpiece” (1975). Participó, además, de forma esporádica con el elenco de superestrellas salseras de la Fania en conciertos como los del Red Garter (1968) y el Club Cheetah (1971), ambos en Nueva York.
De su mano se dieron a conocer voces importantes en el género, además de Quintana, como Lalo Rodríguez y La India, quienes incursionaron posteriormente en la salsa romántica.
Entrada la década de 1990, Palmieri se decantó por otra de las ramas latinas en las que brilló durante su carrera: el latin jazz. Por eso, hasta sus últimos años, mantuvo un ensamble más reducido que La Perfecta, en el que participaron músicos como Hermán Olivera (voz), Nelson González (tres cubano) y Johnny Rivero (percusión).
Recientemente, el pianista había cancelado una participación en un concierto en Nueva York aquejado por problemas de salud. “Mi corazón está con ustedes, aunque mi cuerpo no pueda estar allí como tanto lo deseaba. Mi médico me ha pedido que evite viajar en este momento para cuidar mi salud, pero eso no detiene mi amor ni mi gratitud por la isla que siempre ha sido mi grandiosa patria, Puerto Rico”, dijo Palmieri.