Fotos: Alfredo Soria/ACG

Un Cuento de Pescadores, película dirigida por Edgar Nito, es una obra que sumerge a los espectadores en una atmósfera de terror y misticismo, inspirada en las leyendas de la Riviera del Lago de Pátzcuaro. La película, que forma parte de la competencia de Largometraje Mexicano en el FICM, mezcla el folclore local con elementos clásicos del cine de horror.

La trama gira en torno a la mítica figura de La Miringua, una presencia que los pescadores creen que habita en el lago. Se les manifiesta a los pescadores, en la órbita de sus deseos, los lleva al enfrentamiento de su realidad.

La leyenda cuenta que La Miringua arrastra y ahoga a los pescadores en el lago como castigo por sus pecados, una metáfora de la pérdida de recursos y la destrucción de lo sagrado.

El filme destaca por su uso del entorno natural, donde el Lago de Pátzcuaro y sus islas adquieren un aura mística y aterradora. El director logra capturar el encanto y el misterio del lugar, haciendo que el agua y sus profundidades sean personajes en sí mismos. Los sonidos estruendosos y el manejo de la oscuridad en las secuencias refuerzan la tensión, recordando lo mejor del cine clásico de terror.

Un Cuento para Pescadores juega con el folclore y lo sobrenatural, creando una narrativa que asusta y evoca una reflexión sobre el respeto a la naturaleza y las consecuencias de los actos humanos.

La película encarna una leyenda michoacana contada en pantalla, recuerda sobre el respeto a los elementos naturales y los mitos que surgen cuando la humanidad rompe su equilibrio con ella.