La luciernaga ya está en peligro de extinción se pide respetar reglamentos e informarse el tipo de vestimenta que deben llevar
Lucero Ramos / La Voz de Michoacán
Morelia, Michoacán.- Espectáculo de luz y resplandor de las luciérnagas en los bosques michoacanos podrá admirarse en El Llanito "los Ailes", ubicado en el municipio de Tlalpujahua y otros cuatro santuarios que cuentan con un imponente ambiente natural y con la presencia de hasta 29 especies de luciérnagas, abundando la photinus, informaron encargados del santuario y de la Secretaria de Turismo de Michoacán.
En rueda de prensa convocada para este miércoles señalaron que cada año llegan más insectos gracias a la conservación de los parques y que los primeros asentamientos ya comenzaron a vislumbrar la especie lucidota atra, o luciérnaga negra.
Informaron que es en julio y agosto cuando se comienza con una la población mayor y cuando el parque abre sus puertas, para recibir a los visitantes que deben asistir con respeto al medio ambiente y a esta especie en peligro de extinción.
Así mismo se pide enérgicamente no intentar cazar a los insectos para llevarlos a casa, sino dejarlos en su hábitat a fin evitar su extinción latente.
Destacaron que los turistas también podrán encontrar artesanías representativas del lugar hechas de vidrio ahumado, típico de Tlalpujahua.
- San Joaquin Morelos, Tlalpujahua
- Umécuaro
- Mineral, Angangeo
"AMOR A PRIMERA LUZ"
Al caer la noche, los destellos de luz aquí y allá indican un ritual de atracción y conquista entre las luciérnagas.
¿Por qué brillan estos insectos? Se debe a una sustancia llamada luciferina situada en las células al final de su abdomen que, al entrar en contacto con el oxígeno suministrado a través de las tráqueas, se produce una reacción química que hace que emitan luz.
Otras células –también en el abdomen–, contienen cristales de ácido úrico que reflejan y amplifican el brillo. A este efecto se le conoce como bioluminiscencia, común tanto en machos como en las hembras.
Las luciérnagas emplean esta luz como parte de un cortejo de apareamiento, pero también como mecanismo de defensa contra potenciales depredadores.