Ante la alerta de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre esta peligrosa enfermedad, se mantiene la vigilancia en la entidad
Morelia, Michoacán, a 24 de agosto de 2024.- En el estado no se han presentado casos mpox, también conocido como viruela del mono, así lo informó el jefe del Departamento de Epidemiología de la Secretaría de Salud de Michoacán (SSM), Fabio Silahua Silva.
El especialista compartió que, pese a que no se han detectado casos positivos de esta peligrosa enfermedad en la entidad, se mantiene la vigilancia. Esto, luego de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzara una alerta por un cambio en la cepa del padecimiento, que es más intensa en síntomas y con una probabilidad de mortalidad más alta.
“¿Cuántos casos hay en México? No los hay todavía, ahorita afortunadamente. No tenemos ningún caso importado, pero sí tenemos estrecha la vigilancia epidemiologíca, para estar pendientes en todo el país. Está una vigilancia epidemiologíca en el país muy buena, además hay una unidad que se llama Inteligencia Epidemiologíca que se encarga de monitoriar lo que sucede en redes sociales, en las noticias o los comentarios que se puedan generar respecto a si se presenta la enfermedad, nosotros detectamos y nos ponemos en contacto para tratar al paciente”.
Algunos de los síntomas que se presentan son: fiebre, dolor de cabeza intenso, ganglios atrás de la oreja o en el cuello, dolor de cintura y músculos. Posteriormente comienzan a salir ronchas en la cara y en el cuerpo; por lo que a veces es necesario internar al paciente.
“La viruela del mono más o menos tarda en incubarse de 5 a 21 días, y esto solo es a través del contacto directo con un enfermo. Así que para que una persona se enferme, tiene que haber un contacto directo con ella, y bueno se menciona que la práctica sexual con un individuo que tiene esta enfermedad o una persona, obvio que se va a enfermar”.
Hay que señalar que todavía no hay vacuna ni tratamiento, por lo que solo se atienden los síntomas generales, para disminuir la fiebre y mantener hidratado al paciente, junto con una vigilancia para evitar que se agrave.