En entrevista con la vocera del comité, se señalan deficiencias en la voluntad política en Michoacán, así como problemas en los protocolos de búsqueda e identificación de restos.

Abril García / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. En este Día de las Madres, mujeres en Michoacán se encuentran en la búsqueda permanente de sus hijos y de sus hijas, los cuales se encuentran en estado de desaparecidos.

Una de ellas es Marinty López, madre de José Ángel Sánchez, quien desapareció en el municipio de Ciudad Hidalgo el 19 de marzo en el año de 2018.

Del mismo modo, Martha González no pierde la esperanza de encontrar a su hijastro Marco Antonio Hernández, quien no ha sido visto desde el pasado 19 de marzo, cuando se dirigía a la plaza de Melchor Ocampo del municipio de Uruapan para reunirse con una persona que le daría empleo de cortador de aguacate. "La verdad tanto para su madre como para mí sería magnífico poder estar junto a él en este día tan especial”, sostuvo.

En este marco, el Comité de Familiares de Personas Detenidas-Desaparecidas en México (COFADDEM) convocó a una marcha junto con las madres de personas desaparecidas en Michoacán partiendo desde el deportivo Venustiano Carranza con dirección a la XXI Zona Militar.

En entrevista con La Voz de Michoacán, la vocera Dora Jaimes, compartió que el propósito de que la manifestación se concentre en este espacio es señalar al Ejército Mexicano como uno de los actores principales en la desaparición forzada y en las ejecuciones extrajudiciales en México y en Michoacán.

“Desde los años setentas, se ha documentado bajo los registros del archivo nacional que, en las desapariciones forzadas, en nuestro país y en nuestro estado, de los principales perpetradores ha sido el Ejército Mexicano”, declaró. Así, la concentración se hace como un ejercicio de memoria de que “han sido parte contundente y directa de la desaparición de miles de personas en nuestro país desde la Guerra Sucia en la que Michoacán no ha estado ausente”.

Acciones del comité

La vocera de esta comisión, informó sobre las actividades de acompañamiento y de asesoramiento a familiares en la búsqueda de personas desaparecidas, principalmente por desaparición forzada. “Es un espacio para fortalecernos a nosotros entre familiares y víctimas de graves violaciones a derechos humanos. En este caso de desapariciones forzadas, pero que van ligadas a actos de tortura o de ejecuciones extrajudiciales”, puntualizó.

A pesar de que sus operativamente las posibilidades de la Organización No Gubernamental (ONG) no son muy amplias, han documentado aproximadamente 30 casos y acompañado más de 300. Con base en experiencia de sus propios casos, han dado asesoramiento a las familias desde hace más de 10 años. Así mismo, han contribuido en el proceso de las legislaciones por la desaparición y la tipificación del delito de desaparición forzada.

Protocolos de búsqueda

Para Dora Jaimes, la búsqueda en vida se erige como el principio elemental, donde se debe iniciar con la presunción de vida de la persona desaparecida. Señaló que las búsquedas deben realizarse con un enfoque de respeto hacia la dignidad humana de las víctimas, independientemente del contexto en el que hayan desaparecido.

Enfatizó la necesidad de realizar las búsquedas con políticas públicas respaldadas por una comisión especializada que lleve a cabo una estrategia de búsqueda, con autonomía y en coordinación con la Fiscalía General del Estado (FGE) para garantizar resultados concretos.

La vocera del comité recalcó el derecho a la participación de los familiares en los procesos de búsqueda, así como de sus representantes legales, organizaciones autorizadas y amigos con intereses legítimos en todas las etapas.

El caso de Michoacán

En el estado de Michoacán, persisten casos de desapariciones sin resolver, incluyendo casos de personas desaparecidas desde hace más de una década. “En Michoacán ha sido muy deficiente la voluntad política”, sostuvo.

Esto es debido a que “los protocolos para entrar en fosas y para localizar restos son deficientes. No se tienen herramientas forenses y protocolos de búsquedas adecuados”, declaró. Entre las deficiencias que integrante del comité identifica en el estado, destaca que no se consideran factores como la perspectiva de género en búsquedas de mujeres y los patrones culturales para la búsqueda de personas indígenas.

De igual manera, señaló que la búsqueda debe ser sin dilación, “tan pronto las autoridades tengan conocimiento sobre la desaparición de forma inmediata y de manera esperita, sin que se suspendan a ningún plazo de tiempo de localización como las famosas 72 horas” agregó.

Sonora y Veracruz

En comparación con otros estados como Sonora, donde se destaca la participación por parte de comités de búsqueda de familiares, Michoacán aún necesita implementar sus protocolos de búsqueda y de identificación de restos.

Sin embargo, para la vocera, se corre el riesgo de quedar en una situación como Veracruz, donde encontraron demasiados cuerpos en fosas clandestinas y “no supieron que hacer con tanto, no se dan abasto porque no se tienen los medios y las herramientas necesarias para su identificación”.