El CJNG intensifica su reclutamiento forzado en Jalisco, capturando jóvenes al azar.

Durante esta semana, periodistas, activistas y parientes de desaparecidos han expuesto un alarmante método del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) para integrar a jóvenes a su organización; Según reportes, bajo el liderazgo de Nemesio “El Mencho” Oseguera Cervantes, el grupo está realizando reclutamiento forzado a individuos cerca de la Central de Autobuses de Tlaquepaque.

Autoridades han verificado 35 casos de desapariciones en este lugar, de los cuales 18 personas han sido encontradas, dos sin vida y 15 permanecen desaparecidas. En la mayoría de estos casos, la última vez que las víctimas contactaron a sus familias fue desde esta ubicación.

A pesar de que el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, descarta que exista una crisis de desapariciones, argumentando que muchas son ‘ausencias voluntarias’, Jorge Ramírez, miembro del Comité Universitario de Análisis en Materia de Desaparición de Personas, contradice esta visión y afirma que el CJNG juega un papel crucial en estas desapariciones.

Él menciona que ‘es por prudencia y porque es evidente’ que no se habla más del tema, y agrega que la mayoría de las víctimas son jóvenes hombres en búsqueda de mejores condiciones de vida fuera de la violencia y pobreza de sus comunidades.

‘Los tienen en casas de seguridad, sin comunicación, a la espera de asignaciones que pueden ser diversas. Hemos sabido que a algunos los ponen a preparar las dosis de droga para el narcomenudeo; a unos los fuerzan a integrarse como sicarios; otros son trasladados inmediatamente a los puntos de conflicto como combatientes con poca preparación’, explica Ramírez sobre el destino de los reclutados.

Nancy Chávez, académica del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), señala que la narcocultura ha jugado un rol en la atracción de jóvenes hacia el crimen organizado, ofreciendo un sentido de pertenencia a través de música y simbolismos.

Ella describe cómo la violencia, amenazas y el chantaje son herramientas de coerción usadas por el CJNG para asegurar el apoyo de comunidades enteras.

En resumen, el reclutamiento de jóvenes por el CJNG en Jalisco no solo implica coerción, sino también la explotación de la vulnerabilidad económica y social de las víctimas.