Un desprendimiento de rocas ocurrido la mañana del lunes en la zona del Tepeyac encendió las alertas entre autoridades y peregrinos que se encontraban en las cercanías de la Basílica de Guadalupe, uno de los recintos religiosos más visitados de América Latina.
El incidente se registró sobre la calle Cantera, en la colonia Rosas del Tepeyac, cuando una enorme piedra de más de dos metros de diámetro se deslizó desde un talud del cerro, impactando en la vía pública y lesionando a un hombre de la tercera edad que transitaba por la zona; de inmediato, cuerpos de emergencia acudieron al sitio para brindar atención médica al afectado, quien fue trasladado a un hospital sin que su vida corriera peligro.
Al lugar acudieron elementos de Protección Civil, el Heroico Cuerpo de Bomberos y la Secretaría de Seguridad Ciudadana, quienes acordonaron el área y realizaron maniobras de contención. Además de la atención al herido, también se reportaron afectaciones en la barda perimetral de la Casa del Peregrino, frente a una estación del Metrobús, lo que obligó a cerrar temporalmente el tránsito peatonal y vehicular.
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Los trabajos para fragmentar y retirar la roca concluyeron alrededor del mediodía, permitiendo restablecer la circulación en el área. No obstante, la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRPC) anunció que se mantendrán en vigilancia permanente ante el riesgo de nuevos deslizamientos, especialmente en esta temporada de lluvias.
El evento coincidió con una jornada de alta concentración de peregrinos que se dirigían a la Basílica de Guadalupe, muchos provenientes de estados. Se estima que más de 100 mil personas arribaron al recinto religioso ese día, lo que incrementó el nivel de atención ante posibles emergencias.
Las autoridades capitalinas exhortaron a la población a extremar precauciones al transitar por zonas cercanas al cerro y a seguir indicaciones de seguridad durante su estancia en los alrededores del templo guadalupano. También anunciaron que se realizarán inspecciones adicionales en puntos considerados de riesgo geológico para evitar nuevos incidentes.
Fuente: Debate