El conflicto en Chiapas, causa a miles de personas a dejar sus hogares y busquen seguridad

Redacción / La Voz de Michoacán

Comalapa, Chiapas. La violencia del crimen organizado desencadeno el desplazamiento masivo familias en la frontera de Comalapa, Chiapas después del secuestro de 70 personas.

Según denuncias de los pobladores, un grupo armado, presuntamente vinculado a uno de los cárteles que operan en la zona, irrumpió violentamente en las comunidades de Paso Hondo y Bellavista del Norte el miércoles pasado, llevándose por la fuerza a aproximadamente 70 hombres.

"Un grupo armado se llevó a 70 hombres de los ejidos. Más tarde, nos amenazaron con que regresarían por los jóvenes de 18 años en adelante", relató uno de los habitantes, quien prefirió mantenerse en el anonimato por temor a represalias.

Ante estas amenazas, numerosas familias huyeron a las montañas en busca de refugio, enfrentando condiciones extremas de hambre y frío. "Las mujeres y sus hijos pasaron la noche y madrugada en la intemperie. Hasta este jueves 22, aún no han podido regresar a sus hogares", añadió el testigo.

Esto sucede en el contexto de los enfrentamientos entre dos cárteles que se disputan el control de la región; la población es utilizada como escudo humano en barricadas, y muchos han sido obligados a colaborar con los grupos delictivos bajo amenaza de muerte.

El desplazamiento forzado no es un fenómeno aislado en la región, anteriormente, en una carta abierta, habitantes de varias comunidades de Frontera Comalapa narraron el terror vivieron por la creciente violencia.

"Somos vecinos de varios ejidos que pudimos escapar. Estamos siendo atacados por grupos que se autodenominan delincuencia organizada, pero que todos sabemos son cárteles que llevan meses en guerra", expresaron en el documento, donde también pidieron ayuda urgente para sobrevivir a esta crisis.

"Los cárteles se llevan a hombres, mujeres y niños. Nos están obligando a abandonar nuestras tierras, nuestras casas, y lo poco que tenemos", mencionan los pobladores en su carta. La mayoría de los desplazados buscan refugio en parroquias de las diócesis de San Cristóbal, Tapachula y Tuxtla Gutiérrez, así como en casas de familiares y amigos.

Entre las comunidades que sufrieron de este éxodo se encuentran Paso Hondo, Santa Rita, Verapaz, Ejido 24 de Febrero, Tampico, Ejido Bella Vista del Norte, Barrio Nueva Delicias, Guadalupe Grijalva, La Sabinada, Ejido Tres Maravillas, Barrio Monteverde, y otros barrios del municipio de Frontera Comalapa. En el vecino municipio de Amatenango de la Frontera, también se registró desplazamientos masivos en localidades como Ejido Nueva Morelia, Ranchería Michoacán, Ejido Pacayalito, y Barrio Bienestar Social.

Los desplazados, temerosos de represalias, piden ayuda urgente a la sociedad civil y a las autoridades. "Necesitamos apoyo para seguir vivos. Queremos trabajar y vivir en paz, pero los cárteles nos controlan y nos usan para sus propios intereses", concluyen los pobladores en su escrito.

Este no es un hecho aislado, la lucha entre los cárteles en Chiapas ha escalado de manera alarmante en los últimos días, ya que, en municipios como Chicomuselo, entre 5,000 y 6,000 personas dejaron sus hogares

"La violencia es insoportable. Los cárteles no sólo secuestran y matan, también nos impiden trabajar y nos roban lo poco que tenemos", comentó un habitante de la frontera.

Este jueves, elementos de Protección Civil de Siltepec, en coordinación con la policía municipal, recibieron a unas 53 familias vulnerables de Chicomuselo, brindando refugio temporal a 35 de ellas.

El secretario de Protección Civil de Chiapas reconoció que la situación es crítica y que, aunque atendieron a algunos desplazados, muchos otros huyeron a lugares desconocidos en busca de seguridad: "Estamos trabajando para localizar a todos los desplazados y brindarles la ayuda humanitaria que necesitan", aseguró.