El pasado martes se dio lectura al testamento de Silvia Pinal durante una reunión privada entre integrantes de la dinastía Guzmán Pinal

Ciudad de México.- A pesar de la discreción mantenida por la familia de Silvia Pinal sobre el legado de la legendaria actriz, el programa *Ventaneando* informó que el martes 17 de diciembre se realizó la lectura del testamento de la última diva del cine de oro mexicano, aunque se había anticipado que esto ocurriría hasta el 15 de enero.

Según el programa de espectáculos de TV Azteca, la reunión tuvo lugar a puerta cerrada en el domicilio de la productora María Elena Galindo, a quien designó como albacea sustituta tras el fallecimiento de su hermana Tina, la albacea original.

Entre los asistentes se encontraban Sylvia Pasquel, Alejandra Guzmán, Stephanie y Michelle Salas, además de Camila Valero, Luis Enrique Guzmán con sus hijas, y Efigenia Ramos, asistente de la matriarca de la dinastía Pinal.

Aunque aún no se ha divulgado la distribución exacta de los bienes de la querida presentadora de televisión, la única que ofreció declaraciones al salir fue Alejandra Guzmán, quien comentó:

“¿Qué quieren que les diga?… Ahorita no les puedo decir nada, aún no… ¿Ok?, gracias.”

Los reporteros de Ventaneando captaron a otros miembros de la familia Pinal saliendo del lugar en distintos momentos de la noche, pero ninguno expresó su opinión al respecto. Incluso, se vio al notario público encargado de la lectura del testamento retirándose con los documentos en mano.

El informe del medio señaló que la herencia de Silvia Pinal incluye varias propiedades, como su casa en el Pedregal, edificios y estacionamientos en la Ciudad de México, su casa en Acapulco, una amplia colección de arte que incluye un cuadro pintado por Diego Rivera, así como objetos personales y dinero en cuentas bancarias.

“Lo que sí está confirmado es que en el testamento están contemplados los hijos y las nietas, y bisnietas, y Efi, al parecer, hay dos o tres amigos que también están incluidos, que después los daremos a conocer. Lo que me llamó la atención de esta imagen de Alejandra Guzmán saliendo de la casa donde se leyó el testamento es que tiene como muy rígida la mandíbula. Me da la impresión de que hubo algún jaloneo, alguna discusión, donde no se pusieron de acuerdo”, mencionó Pati Chapoy al concluir la nota.