Morelia, Michoacán

Lo que está pasando en Cotija debería de prender una alarma a nivel nacional, pues si no se atiende podría ser el detonante de una serie de problemas en varios municipios de Michoacán, opinó el dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Guillermo Valencia Reyes.

“Lo que está pasando en Cotija debería de ser una alerta nacional porque está roto el contrato social, no hay normalidad gubernamental, ya no digamos democrática”, opinó el priista.

Memo Valencia consideró que tendría que haberse actuado desde que secuestraron a la presidenta municipal, Yolanda Sánchez, ya que después fue asesinada “y no pasó nada” y ahora no se permitió la toma de protesta del actual presidente electo.

“Tuvieron tiempo para haber aplicado la ey desde el secuestro de la alcaldesa, en paz descanse, debería de darnos pena a los políticos, del partido que sea, no alzar la voz para evitar lo que está pasando”, manifestó y se solidarizó con el PAN, de donde proviene el presidente electo.

El priista señaló que cuatro de sus presidentes municipales han externado que corre riesgo su seguridad -aunque pudiera haber más, que no se atreven a denunciar-, y que aunque la respuesta del Gobierno del Estado ha sido favorable y no ha sido indiferente ante ello, es señal de que Cotija no es el único foco rojo y de no atenderse, podría desencadenar más problemas:

“Mi solidaridad con el PAN y mi exigencia al gobierno para que establezca el orden porque puede ser la primera ficha del dominó que se caiga y desencadene una reacción en cadena en otros municipios de Michoacán”, alertó.