Cuando el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), ha dado a conocer que sólo el 24.5 por ciento de la población confía en el desempeño de sus policías, hay quienes consideran que lo cifra es aun muy noble, ya que hoy incluso hay quienes temen más a un uniformado por la forma en que han actuado contra la sociedad.

Lo anterior durante un breve sondeo en el primer cuadro de la ciudad, donde también se encontró como respuesta que el comportamiento de muchos uniformados al dirigirse a la sociedad no son los adecuados por la forma en que se dirigen ,incluso más que generadores de confianza, lo son de temor.

Entre las críticas está el homicidio de un joven en la salida a Mil Cumbres, el asalto a un joven en pleno centro de la ciudad al que también arrollaron con la patrulla, entre otras mañas acciones como el que llegan a despejar a ciudadanos de sus pertenencias o dinero cuando hacen supuestas revisiones de rutina.

Otra de las críticas consiste en que no es raro verlos en cualquier parte de la ciudad haciendo uso de sus teléfonos celulares, en lugar de estar a la expectativa para cualquier situación que pudiera presentarse, en tanto que cuando algunos policías están estacionados en algún lugar, por ahí pasan otras patrullas en aparente servicio con torretas y sirenas encendidas.