Los gobiernos que se adhieran al Reto de las NDC (Contribuciones Nacionalmente Determinadas) Azules se comprometen a redoblar sus esfuerzos para reducir las emisiones
Brasil ha presentado este lunes, jornada inaugural de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos (UNOC3), el Reto de las NDC Azules, iniciativa que insta a todos los países a poner el océano en el centro de sus planes climáticos antes de la COP30 de Belém, en noviembre.
Australia, Fiyi, Kenia, México, Palaos y la República de Seychelles ya se han unido a esta propuesta, que busca «avanzar en la cooperación internacional sobre la acción climática oceánica en el período previo a la COP30», ha expuesto la ministra de Medio Ambiente y Cambio Climático de Brasil, Marina Silva.
Los gobiernos que se adhieran al Reto de las NDC (Contribuciones Nacionalmente Determinadas) Azules se comprometen a redoblar sus esfuerzos para reducir las emisiones y a aumentar la resiliencia mediante soluciones basadas en los océanos.
Según el contexto de cada país, esas soluciones pueden consistir en la creación de áreas marinas protegidas «climáticamente inteligentes», la eliminación progresiva de la producción de petróleo y gas en alta mar o el apoyo a la pesca y acuicultura sostenibles, entre otros ejemplos que ofrecen los impulsores.
La iniciativa cuenta con el apoyo de Ocean Conservancy, Ocean & Climate Platform y World Resources Institute y ha sido respaldada por WWF-Brasil.
Marina Correa, responsable de Océanos en esta última institución, ha asegurado que «como anfitrión de la próxima conferencia sobre el clima, Brasil tiene una oportunidad única de predicar con el ejemplo con una agenda ambiciosa, basada en la ciencia y la naturaleza, que amplifique las voces de las comunidades vulnerables».
Brasil alberga ecosistemas marinos de importancia mundial, como los únicos arrecifes de coral del Atlántico Sur y el mayor cinturón contiguo de manglares del mundo a lo largo de la costa amazónica.