Un bebé de dos años de edad murió ahogado tras caer accidentalmente a un tambo con agua.

El menor se encontraba jugando en el patio de su casa cuando cayó accidentalmente en el tanque.

Su madre fue quien lo encontró al interior del tambo de agua, por lo que de inmediato lo trasladó a un hospital, sin embargo, ya no presentaba signos vitales.

Los hechos ocurrieron al interior de un domicilio en la localidad de  Santiago de Papasquiario, en el estado de Durango.

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De acuerdo con el testimonio de la madre del bebé, no se percató que el menor salió al patio, hasta que, al buscarlo se encontró con la desgarradora escena.

Peritos de Medicina Forense trasladaron el cuerpo a la morgue para la necropsia correspondiente, donde se determinó que la causa de muerte fue asfixia por sumersión.