Durante las celebraciones decembrinas aumentan los reportes de mascotas extraviadas, que se producen por el uso de pirotecnia.

Morelia, Michoacán. Los estruendos de la pirotecnia en festividades como Nochebuena y Año Nuevo tienen consecuencias nefastas, incrementando los reportes de mascotas extraviadas como son perros y gatos, en un 70%.

Esmeralda Cerda Pizano, presidenta de la asociación Generando Hogares de Amor para Animales Desprotegidos (GHAPAD), hace un llamado urgente a la sociedad para ser conscientes de este problema.

Los perros y gatos, con una capacidad auditiva mucho más aguda que la humana, sufren enormemente debido al ruido de los fuegos artificiales. Durante la Navidad de 2023, GHAPAD registró 170 casos de perros perdidos, 40 gatos y 15 muertes por infartos causados por el pánico.

“El ruido ensordecedor los hace correr desesperados, tratando de escapar de algo que no entienden”, explica Cerda Pizano. También relató el trágico incidente de una perrita que falleció de estrés extremo provocado por los cuetes de una vecina, a pesar de haberle pedido que no los usara.

“No soportó el terror”, lamentó la activista. Los animales, aterrorizados por su sensibilidad a sonidos de hasta 65-85 kHz, intentan huir del estruendo.

Además de los animales, la pirotecnia también repercute negativamente en niños con síndrome de Down, enfermos y ancianos, además de dañar el medio ambiente.

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Cerda Pizano insta a proteger a las mascotas durante estas fechas, asegurando un espacio seguro y consultando al veterinario para el manejo adecuado de la situación, incluyendo la posibilidad de administrar Pasiflora bajo supervisión profesional para aliviar el estrés.