El consumo de carne blanca aumenta en esta época de Cuaresma y Semana Santa, sin embargo, los precios del pollo en cualquiera de sus presentaciones han aumentado aproximadamente un 8% en comparación de años pasados.
«Las ventas han bajado, pero los precios se han mantenido en algunos casos. La pierna y el muslo están en $65 el kilo. El pollo entero en $70 y el destazado en $80», dijo la ponente de un local.
Por otro lado, los precios en determinados establecimientos son elevados, pese a su aparente equilibrio para su venta en Semana Santa. «Por lo general en estas fechas si se elevan los precios, no sé por qué, pero los costos en general suben. El kilo está a $70 y el surtido o destazado a $80. El filete está en $175 el kilo, con huacal a $115 y sin huacal a $135», aseveró una joven ponente.
Finalmente, en una rosticería, los precios se mantienen para que la venta no baje, en comparación a la distribución y entrega del pollo crudo. «Aquí nos mantenemos más o menos en el precio, no podemos aumentarlo. En mi local de pollo crudo, aumentó el precio un 8% ($10 más). Las ventas han aumentado por ser carne blanca», argumentó el dueño de una pollería.
Los precios del pollo, pese ser más elevados, no han sido impedimento de que las ventas se mantengan estables con la clientela.