Morelia, Michoacán
La sequía que afecta a la zona sur del Lago de Pátzcuaro ha desencadenado una serie de invasiones de la zona, generando conflictos entre comunidades y amenazando la estabilidad de la región, según denuncia el Consejo Supremo Indígena de Michoacán (CSIM). Armando Bartolo de Jesús, administrador de bienes comunales de Jarácuaro e integrante del CSIM, alerta sobre las graves consecuencias de esta situación.
“A raíz de la sequía, nuestra comunidad ha comenzado a sufrir invasiones de tierras para pastoreo. Si bien es cierto que la parte sur del lago no se ha secado por completo, esta situación ha afectado a nuestros hermanos de las islas y ha provocado una disminución en el turismo, una actividad vital para muchos compañeros indígenas”, señala Bartolo de Jesús.
El administrador de bienes comunales destaca que, si bien en la parte de Jarácuaro se ha sentido menos el impacto de la sequía, la situación es diferente en otras zonas de la comunidad. “En la parte poniente y norte de Jarácuaro, la afectación es grave. Personas de comunidades aledañas han intentado invadir nuestras tierras, colocando cercados de postes y alambre”, explica.
Bartolo de Jesús también menciona el cambio en la dinámica del ganado, que ahora cruza libremente por territorio comunal debido a la sequía. “El canal que solía limitar el paso de personas y ganado para evitar invasiones ahora ya no cumple esa función. Esto genera tensiones y conflictos con las comunidades vecinas”, agrega.
La invasión de tierras no solo representa un problema de propiedad y uso del suelo, sino que también puede derivar en conflictos sociales más graves. “La invasión de tierras trae consigo conflictos con otras comunidades. Estamos en una situación de espera, buscando una solución pacífica pero preparados para defender nuestro territorio si es necesario”, advierte Bartolo de Jesús.
Ante esta preocupante situación, el CSIM hace un llamado a las autoridades correspondientes para que intervengan y busquen soluciones que eviten mayores tensiones y conflictos en la región. La sequía no solo afecta a la disponibilidad de agua, sino que también desencadena una serie de problemas sociales y ambientales que requieren atención urgente.
